El texto que sigue es una transcripción de la cobertura del evento hecha por Democracy now!

La semana pasada, once candidatos a la presidencia en 2020 (diez del partido demócrata y uno independiente), entre los que se encontraban los senadores Bernie Sanders y Elizabeth Warren, departieron frente a comunidades indígenas en la primera edición del foro presidencial de pueblos originarios Frank LaMere, que tuvo lugar en la ciudad de Sioux. Durante el evento, que duró dos días, los candidatos respondieron en forma individual a preguntas hechas por un panel de líderes, jóvenes y ancianos de distintas comunidades. Las preguntas trataron tópicos como los derechos que emanan de los tratados firmados en el comienzo de la colonización, la intimidación a los votantes y el asesinato y la desaparición de mujeres indígenas.

–Amy Goodman: Diez candidatos a presidente, entre los que se encuentran los senadores Bernie Sanders y Elizabeth Warren, viajaron esta semana hasta la ciudad de Sioux, en el estado de Iowa, para participar de la primera edición del Foro Presidencial de Pueblos Originarios. El foro se desarrolló pocas semanas después de que la congresista Deb Haaland, una de las dos primeras mujeres indígenas en el Congreso, respaldara públicamente la candidatura de Warren, a quien calificó como “una gran compañera de las comunidades indígenas”. El año pasado, Warren había sido cuestionada luego de exhibir los resultados de un examen de ADN a partir del cual se confirmaba su supuesta ascendencia indígena. Durante el evento, la senadora pidió disculpas por sus acciones.

–Sen. Elizabeth Warren: En primer lugar, antes de extenderme en otras direcciones, quiero decir que sé, como cualquiera que sea honesto consigo mismo, que he cometido errores. Pido disculpas por el daño que causé. He escuchado y he aprendido mucho, y estoy agradecida por todas las conversaciones que tuvimos juntos. Es un gran honor poder acompañar a las comunidades indígenas y eso es lo que intenté hacer como senadora y lo que prometo hacer como presidente de los Estados Unidos.

La historia de los gobiernos nacionales y las naciones originarias es una historia de promesas incumplidas. Debemos modificar esto y debemos honrar nuestras obligaciones, que surgen de los tratados firmados. Y esto no se logra con la inauguración de una estatua perdida por aquí o con un par de modificaciones en las regulaciones por allá. Esto se logra a partir de modificaciones estructurales y así es como lo entiendo yo. Piensen de esta manera:  necesitamos destinar muchos fondos a la vivienda, la salud, la educación y la infraestructura. Nada de eso es opcional: se trata de modificar las reglas y hacerlo realidad.

–Amy Goodman: En el transcurso del Foro, Marcella LeBeau, una veterana de 99 años del Cuerpo de Enfermeras del Ejército Norteamericano perteneciente a la comunidad Cheyene, hizo una pregunta al senador Bernie Sanders.

–Marcella Lebeau: En efecto, tengo una pregunta que está relacionada con la masacre de Wounded Knee. Mi opinión personal es que existe una tristeza omnipresente en nuestra reserva, consecuencia de cicatrices que no fueron cerradas y que datan del momento en que se entregaron Medallas de Honor a los soldados del 7° Regimiento de Caballería que participaron de la masacre, que asesinaron aproximadamente a 250 mujeres y niños, así como al líder lakota, que ya estaba enfermo de neumonía. Todas estas cosas están relacionadas con la sensación de desamparo de la gente de nuestra reserva. Entonces, mi pregunta es: ¿va a apoyar la eliminación de la Stain act¹? Esa es mi pregunta.

–Sen. Bernie Sanders: La respuesta es sí, absolutamente. Las Medallas de Honor se entregan excepcionalmente y sólo a personas que hacen cosas muy importantes. Y quiero agradecerte por tu trabajo; sé que fuiste reconocida, creo que por el gobierno francés y también en otros lugares, por el trabajo que llevaste a cabo salvando vidas durante la Segunda Guerra Mundial. Ese es el tipo de personas a las que se entregan las Medallas de Honor, personas que demuestran enorme valentía. Asesinar mujeres y niños no es un acto de valentía; es un acto de la peor depravación.

Como saben, esta tarde, en los pocos minutos que esté aquí con ustedes, no vamos a resolver todos los problemas que arrastramos desde hace 500 años. Pero creo que es importante, y similar, por cierto, a la manera en que tratamos la problemática de la esclavitud, es importante entender que ya hace mucho es tiempo de que discutamos qué sucedió cuando llegaron aquí los primeros colonizadores y cuáles fueron las terribles y espantosas cosas que le hicieron a las personas que vivían aquí, no sólo en la masacre de Wounded Knee sino también en muchos otros lugares. Creo que esa es una discusión que los estadounidenses sin duda quieren tener. Y en el fondo de esa discusión tiene que aparecer nuestra obligación por hacer todo lo que esté a nuestro alcance para reparar el daño (el daño psicológico, las humillaciones) y para atender las necesidades reales de las comunidades de hoy, que en muchos casos viven en la pobreza. Hay mucho trabajo por hacer. Pero reconocer —cosa que no va a ser fácil, porque hay mucho dolor en ese reconocimiento— reconocer lo que hicieron los colonizadores y lo que sucedió a partir de su llegada es algo que este país va tener que hacer. Yo espero, como presidente, poder hacerlo junto a ustedes. Muchas gracias.

–Amy Goodman: Entre los otros candidatos se encontraba también Mark Charles, ciudadano de la nación Navaja que compite de manera independiente, por fuera de los partidos republicano y demócrata.

–Mark Charles: El asesinato y la desaparición de mujeres indígenas es un problema demasiado grande en nuestra nación, en nuestras comunidades. Es probable que la mayoría de los presentes en esta sala no sólo se haya enterado de esto por las noticias; es probable que tengan un pariente o un amigo o un vecino que esté desaparecido o que haya sido asesinado o atacado sin que ninguno de esos casos haya sido debidamente investigado.

Muchos candidatos van a proponer nuevas leyes para proteger la vulnerabilidad de estas comunidades. Yo diría que no necesitamos nuevas leyes, necesitamos nuevas bases para nuestra ley. Si la Constitución no menciona en ningún momento a las mujeres, no podemos sorprendernos cuando se viola, asesina o desaparecen mujeres. Pero a la policía y a la sociedad eso no le importa. No necesitamos nuevas leyes; necesitamos una nueva base para nuestra ley. Tenemos que cuestionar los cimientos sobre los cuales se construyó este país.


¹ Acta del Congreso por la cual se entregaron Medallas de Honor a los soldados responsables de la Masacre de Wounded Knee.

Traducción de Pressenza, Mauro Haddad

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