El partido Tavini huiraatira, liderado por el ex jefe de Estado Oscar Temaru, obtuvo en la segunda vuelta de las elecciones del archipiélago 44.3% de los votos y con ello, la mayoría en la Asamblea Regional, que permitirá a esta formación política gobernar en los próximos cinco años.

El resultado permite inferir que habrá un nuevo impulso para iniciar negociaciones con el gobierno francés para la realización de un referendo, en el que los 280 mil habitantes decidan si quieren ser una nación independiente.

Ya en 2011, el entonces presidente Temaru anunció que quería poner fin a «170 años de colonización» en la Polinesia Francesa solicitando la inclusión de la comunidad en la lista de la ONU de territorios no autónomos a descolonizar, lo que se consiguió dos años más tarde.

Tristemente célebre es el atolón de Mururoa, que fue entregado por la Asamblea Territorial al Centro de Experimentación del Pacífico, junto con el atolón Fangataufa, para hacer pruebas nucleares. Forma parte forma parte de las islas de la Polinesia colonizada por Francia y está situado al sur del archipiélago, a 1250 km al sureste de Tahití. En ese lugar, entre 1966 a 1974 se realizaron cuarenta y una pruebas nucleares atmosféricas y, hasta 1995, ciento treinta y siete pruebas subterráneas.

Luego de la victoria electoral, el partido nominaría a Moetai Brotherson como próximo Jefe de gobierno, quien señaló que la independencia no se conseguirá “mañana o la semana próxima”.

Francia ha negado repetidamente a los polinesios la oportunidad de plebiscitar la posibilidad de salir de la tutela colonial, mientras que sí habilitó esa posibilidad a la población de Nueva Caledonia, la que rechazó en Octubre de 2020 el acceso a la condición soberana con un 55% de los votos en contra.

La victoria de los independentistas es considerada una nueva derrota del gobierno de Emmanuel Macron, hoy ampliamente cuestionado en su país por la sanción de leyes contrarias al interés de las mayorías populares.