En los primeros cinco meses del 2020, las ventas totales en supermercados pasaron de 9.000 millones de pesos a una cifra cercana a los 15.000 millones. Neuquén quedó en segundo lugar después de CABA, con una variación de ventas corrientes del 64,5%

Las grandes cadenas de ventas, remarcadores seriales, hipersensibles al dólar y uno de los motores de la inflación del país, fueron grandes ganadores del coronavirus: facturaron en Neuquén en los primeros cinco meses de este año un 64,5% más respecto al año anterior, un salto que a su vez fue superior en diez puntos a la inflación anualizada para el período que se ubicó en 54,16%.

Los supermercados vendieron productos entre enero y mayo de este año por un valor de 14.839 millones de pesos, una cifra equivalente a la que movilizó el turismo en Neuquén durante el año pasado. En ese mismo período de tiempo, la facturación del 2019 fue de 9.021 millones de pesos, una variación nominal del 64,5% y real (una vez corregida la inflación) del 3,90%, según un informe publicado por la dirección de Estadística y Censos de la provincia.

En comparación con el resto de las jurisdicciones, las ventas de los supermercados de la provincia lideraron el ranking de crecimiento, después de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (65,78%), y superando en más de 6 puntos porcentuales al incremento promedio del nivel nacional que fue del 58,27%.

El principal impulso de estos aumentos provino del grupo alimentos y bebidas, que representa cerca del 69% de las ventas totales y en el acumulado mostró un aumento real de 5,04%. Como subgrupo, las bajas más evidentes fueron en panadería, carnes y alimentos preparados y rotisería, dice el informe.

La facturación de artículos de limpieza y perfumería aumentó un 66,3% con un incremento real del 4,87%, mientras que los electrónicos lideraron el alza en términos reales con el 22% y una facturación que subió un 94,05%, al pasar de 519 millones en los primeros cinco meses del 2019 a más de 1.000 millones en el mismo período del 2020.

El resto de los grupos presentó disminuciones en sus ventas acumuladas, medidas en términos reales, con respecto al mismo período de 2019. Las ventas de indumentaria y de aquellos productos englobados en el grupo otros (libros, artículos de ferretería, pintura, juguetes, papelería, útiles escolares, plantas, artículos de vivero, equipos y artículos para deportes) presentaron las caídas más pronunciadas, de 13,49% y 12,19% respectivamente

Este año se registró un promedio de unas 1.700.000 operaciones por mes y la facturación mensual por ticket fue de 1.859 pesos. Esta cifra equivale a un aumento de 104,16% frente a los 911 pesos que promediaba mensualmente la facturación por operaciones en los primeros cinco meses del año 2019.

A pesar de que en los primeros cinco meses de este año se registraron 282 mil operaciones menos que en 2019, el volumen de cada compra aumentó un poco más de 28%, reflejando nuevamente el impacto de la cuarentena, que obligó a la población a concurrir a los centros de compra menor cantidad de veces, pero aumentando el valor del ticket promedio.

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