Con un mensaje dirigido a la Nación publicado en la agencia nacional de noticias APS, el presidente saliente de Argelia, Abdelaziz Bouteflika, anunció que «el 18 de abril no habrá elecciones presidenciales» y que él “prolongará», indefinidamente, por el tiempo “necesario», su cuarto mandato presidencial.

Esta es la respuesta del régimen a las manifestaciones pacíficas que han afectado al país durante tres semanas. Este es un verdadero y propio golpe de estado de Bouteflika o, más bien, del séquito político y familiar que lo manipula (su hermano Saïd, Ahmed Gaïd Salah, jefe del personal del ejército, los servicios secretos, su clan).

Sobre quien realmente gobierna Argelia, «Ticino News«, el sábado pasado, mientras el presidente fue hospitalizado en Ginebra para un enésimo chequeo médico, había escrito sobre la presentación ante el Tribunal de la ciudad suiza de una solicitud de «cuidado», ya que él mismo se consideraría «incapaz de discernimiento».

En cuanto al aplazamiento de las elecciones, el caricaturista Alì Dilem la hace reír …

Argelia: un régimen militar-familiar en el cargo durante 20 años

El “presidente” de Argelia, de ochenta y dos años, ha estado en el cargo desde 1999, después la reelección en 2014 con el 81% de los votos en una ronda electoral boicoteada por varios partidos y en la cual, en un país de más de 40 millones de habitantes, habían votado apenas 11 millones.

Bouteflika, que rara vez ha aparecido en público desde que, en 2013, sufrió un derrame cerebral, en su mensaje afirmaba que no hay necesidad de una «observación estricta de plazos preestablecidos». Esta «propuesta» – a la cual, por supuesto, no se admite oposición alguna – se presenta, por supuesto, «en interés del país», como un «camino de salvación», para garantizar «la armonía de las interacciones socio-políticas» y «para proteger a Argelia de las lágrimas».

Una clara referencia a la violencia que podría ocurrir alternativamente. La alusión a la guerra civil de 1999 es claramás de 200 mil muertos, numerosos «desaparecidos» argelinos acusados ​​de actividades «antigubernamentales» y hechos desaparecer por las fuerzas de represión, comunidades enteras exterminadas, intelectuales oprimidos y asesinados por los habituales «oportunistas» del caos», recordaba ayer Fabio Marco Fabbri en «Opinión»).

El anuncio de Bouteflika: el régimen permitirá la votación quizás en 2020

¿Las elecciones? Aplazadas hasta una fecha a determinarse, físicamente no antes de finales de 2020.

De hecho, el presidente cree que primero es necesario «hacer cambios significativos al gobierno en un futuro próximo» y que es «su último deber con el pueblo argelino contribuir a la fundación de una nueva República», y, sobre todo, «para un inicio pacífico».

«El camino» para llegar a las nuevas elecciones, por lo tanto, que propone/impone el mensaje es:

  • nombramiento y ejecución de una «Conferencia Nacional», que tenga las características de ser «inclusiva» e «independiente» (¿de quién?), y en cuya cabeza sea ubicado «un cuerpo presidencial plural, encabezado por un presidente que será una personalidad nacional, independiente, consensual y experta»;
  • la elaboración, propósito de este foro, de un nuevo «proyecto de Constitución», en tiempos razonables … «la conferencia debería esforzarse por completar su mandato para fines de 2019«;
  • llamada a un «referéndum popular» que debería evaluar esta nueva Constitución;
  • indicción, con una nueva constitución aprobada, de las nuevas elecciones presidenciales con fecha a definir más adelante. En esta ocasión, Bouteflika asegura que «no habrá un quinto mandato», en otras palabras, no se candidatizará de nuevo;
  • se creará una «Comisión Nacional Electoral», naturalmente siempre «independiente» (¿de quién?), «en respuesta a una solicitud ampliamente apoyada por los partidos políticos argelinos y a una recomendación constante de las misiones de observación electoral de las organizaciones internacionales y regionales invitadas y recibidas por Argelia en las elecciones nacionales anteriores»;
  • él mismo, si «Dios me concede la vida y la asistencia», se compromete a «entregar los deberes y prerrogativas del Presidente de la República al sucesor que el pueblo argelino elegirá libremente».

Las reacciones al golpe de estado de Argel

¿Los comentarios? Zouhir Mebarki, en una editorial publicada ayer en el periódico «L’Expression», es cáustico: «a este punto, la Constitución actual está de hecho derogada, ya que no prevé la cancelación o el aplazamiento de las elecciones presidenciales».

Para Ali Benflis, oponente de Bouteflika en las elecciones de 2014, como reportó ayer «Le Monde», «la extensión del cuarto mandato es un ataque a la Constitución».

Makhlouf Mehenni, en «Tout sur l’Algerie» (TSA) el lunes, escribió: «en otras palabras, Bouteflika seguirá siendo Presidente de la República hasta que él y el Sistema estén cómodos». Para TSA, esto se trata de verdadero y propio «fraude», que no refleja las demandas populares expresadas en las numerosas manifestaciones pacíficas que tuvieron lugar en Argelia durante tres viernes consecutivos, ya que «estas decisiones fueron tomadas por el gobierno sin consultar a nadie, ni a los partidos de oposición ni a las personalidades nacionales».

La investigadora Amel Boubekeur habla de una «fuerte conciencia del riesgo de explotar las solicitudes de cambio para hacer que el régimen perdure», en una entrevista concedida ayer a Frédéric Bobin para «Le Monde». La mujer usa el término «golpe de estado» y explica que, en Argelia «el problema no es implementar una nueva Constitución, sino respetar las leyes existentes, la Constitución en vigor. El mismo anuncio presidencial en sí no es constitucional».

El único comentario internacional que se publica es el del presidente francés Emmanuel Macron, que habla de «una nueva página para la democracia argelina» (!), pero pide «una duración razonable» para esta «transición». Es así que se merece la sátira del caricaturista Alì Dilem. Es curioso cómo la agencia oficial de noticias argelina APS, al informar ayer las declaraciones de Macron, censura la expresión «una duración razonable».

Por parte de la Unión Europea, y en particular de Jean-Claude Juncker, Presidente de la Comisión Europea, solo se recibe el silencio absoluto.

Por nuestra parte, no vemos que el proyecto anunciado hoy por Bouteflika sea el mismo que apareció en el mensaje del Presidente del 3 de marzo publicado en APS.

¿Qué cambia entonces?

«Cómo reaccionará la plaza» a este golpe de estado, Makhlouf Mehenni se pregunta en TSA. No nos queda que esperar al viernes … Alì Dilem alguna idea la tiene


Traducido del italiano por Michelle Oviedo