En la Facultad de Arte y Diseño de la Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza, iniciaron las actividades de la Cumbre de los Pueblos. Esta cumbre tiene como objetivo discutir la forma de desafiar las implicancias antipopulares de la dirección que está llevando actualmente el organismo regional conformado por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela, ésta última suspendida como parte de la ofensiva internacional de la derecha contra la Revolución Bolivariana. Bolivia también está en proceso de adhesión, por lo que Evo Morales participará también en la Cumbre de Jefes y Jefas de Estado que tendrá lugar el viernes 21.

A ésta han sido convocados también la presidenta Bachelet y otros invitados especiales, siendo los temas centrales a tratar la posibilidad de fortificar el eje Mercosur-Alianza del Pacífico y las negociaciones secretas en curso para intentar sellar un tratado de libre Comercio con la Unión Europea. Seguramente el gobierno argentino, que en esta ocasión dejará la presidencia pro témpore a Brasil, pondrá el acento político en condenar las supuestas violaciones a los derechos humanos del gobierno de Maduro en Venezuela, acento que servirá – pobremente – de autojustificación a los gobiernos que han decidido su suspensión, entre ellos el de Michel Temer, de nula legitimidad institucional y moral.

La Cumbre de los Pueblos, por su parte, apuntando claramente a la vulneración de derechos que está ocurriendo en Argentina, ha decidido proclamar como presidentas honorarias a Nélida Rojas y Milagro Sala,  lideresas de la organización Tupac Amaru.

La apertura de la Cumbre de los Pueblos ha contado con representantes de organizaciones locales nacionales e internacionales. También con autoridades como el embajador de Venezuela Carlos Martínez Mendoza, quien en declaraciones a los medios presentes trajo el saludo del presidente Nicolás Maduro y del pueblo venezolano. Consultado sobre el tema derechos humanos, Martínez afirmó que «si hay algo que la revolución bolivariana ha hecho, ha sido no sólo constitucionalizar estos derechos, sino respetarlos de manera irrestricta.»

Varios parlamentarios se hicieron presentes como el diputado nacional Guillermo Carmona. Entre los diputados del Parlasur, se encontraba Hector Laborde, quien en diálogo con Pressenza lamentó que no se haya realizado la Cumbre Social en el marco institucional del Mercosur, como es lo habitual.

Entre las organizaciones sociales presentes de distintos puntos de la región, dieron su apoyo al evento las Madres de Plaza de Mayo. En su nombre habló la Madre mendocina María de Dominguez.

Para dar la bienvenida a las delegaciones tomó la palabra el anfitrión, decano Drago Brajak, quién fue jubilosamente aplaudido al afirmar: «Aquí nadie es neoliberal». Previo a dar inicio formal a la Cumbre, el académico remarcó con preocupación el avance de «una tendencia demoledora de la derecha a nivel global».

A partir de allí comenzaron las deliberaciones en las mesas alrededor de los cuatro ejes planteados en el documento de convocatoria:

  1. Construcción de la soberanía regional en el contexto global
  2. Una nueva institucionalidad para enfrentar el neoliberalismo. Estado de la democracia en Sudamérica.
  3. Por una inserción económica internacional para la independencia. La integración regional contra el libre-comercio
  4. Movimientos sociales y defensa de los derechos conquistados. Formas de organización del campo popular y regional

Por la tarde continuarán el trabajo de estas mesas, estando prevista la confección de un documento de conclusiones que será entregado al presidente boliviano Evo Morales, quien arribará a primera hora de la mañana del viernes,  para su presentación ante la cumbre oficial.

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Desde la Cumbre de los Pueblos en Mendoza para Pressenza, Ester Previtera, Carlos Buj, Juan José Coscarelli