El día 20 de mayo de este año se llevó a cabo en Lima el SIMPOSIO: CONSTRUYENDO LAS BASES PARA UNA EDUCACIÓN HUMANIZADORA, en el Auditorio del Colegio Peruano Alemán “Alexander von Humboldt”. El evento fue realizado por la Corriente Pedagógica Humanista Universalista – COPEHU, la Unidad de Gestión Educativa Local N° 7 y la Municipalidad de Miraflores, en el marco del Programa de inauguración de la Sala del Parque de Estudio y Reflexión Ihuanco (www.parqueihuanco.org)

En el simposio se presentaron tres libros desarrollados desde el enfoque de la pedagogía de la intencionalidad y una síntesis de las experiencias piloto que se vienen aplicando desde el año 2013 en las escuelas públicas de nivel básica regular.

El libro “Hay un mundo adentro”, de la actriz, periodista y pedagoga teatral y gestora cultural chilena Marcela La Torre, nos invita a descubrir el mundo que hay al interior de nosotros mismos. Para ello, desde el arte nos lleva a viajar imaginariamente en el tiempo, y desde este mundo interno nos lanza en la búsqueda del sentido de nuestras vidas.

Mario Aguilar, educador chileno y coautor del libro “Pedagogía de la Intencionalidad”, presentó dicho libro, indicando que el contexto mayor está marcado por la estandarización de la educación; que se ha perdido el sentido de la educación como acto que etimológicamente significa “extraer algo que está en el ser humano”, es decir, que se ha reducido el papel de la educación olvidando el porqué y el para qué educar, así como la educación en la diversidad. Recogiendo los aportes de Silo, fundador de la corriente de pensamiento del Nuevo Humanismo Universalista, señala que la educación debiera dar dirección al proceso evolutivo del ser humano y que, actualmente, la neurociencia brinda elementos que recrean y reformulan las concepciones del conductismo de estímulo respuesta. Basa su propuesta pedagógica en la sicología de la imagen, de Silo, que define a la conciencia como activa y como una estructura indivisible entre el mundo interno y externo. En tal sentido, el ser humano es visto como intencionalidad. La función de la educación es habilitar, y el aprendizaje es un proceso interno. Finalmente, presentó las llaves del aprendizaje intencional, llaves que permiten crear un ámbito para que el acto de aprender se produzca. Por ejemplo, la neurociencia ha descubierto que el buen humor, es clave porque solo con las risas se irriga determinadas zonas del cerebro.

Andrea Novotny, educadora argentina, fundadora de la COPEHU (www.copehu.org), presentó el libro “Preparando el camino de los nuevos tiempos”, del cual es coautora. Andrea nos invitó a educar mirando el futuro, a ser parte de la construcción del nuevo paradigma que tiene como dirección una vida querida y sentida; a habilitar, es decir, a preparar esos ámbitos para que la intencionalidad se despliegue; a dejar la inercia que entra en conflicto con la sensibilidad de las nuevas generaciones. Afirmó que, así como en el contexto mayor hay elementos regresivos, también hay elementos progresivos que se expresan en los movimientos sociales no violentos que están pugnando por cambiar dicha inercia. Precisó la importancia que tiene la espiritualidad en el proceso educativo, es decir, el contacto con lo sagrado al interior de la conciencia, así como la necesidad de garantizar el libre acceso de las nuevas generaciones a la memoria social histórica del ser humano a través del uso de las nuevas tecnologías, teniendo en cuenta que las nuevas generaciones son nativos tecnológicos.

Jaqueline Mera, educadora e impulsora de la COPEHU en el Perú, presentó las experiencias en las escuelas públicas aplicando el enfoque de la Corriente Pedagógica con niños, jóvenes y adultos, señalando las distintas modalidades de aplicación probadas de esta pedagogía en la escuela: de manera integral, como curso de desarrollo humano-tutoría y/o de manera transversal. La metodología experiencial se divide en tres bloques: psicofísica, a través de dispositivos lúdicos con el objetivo de armonizar los centros de respuesta del psiquismo humano; experiencia interna, a través de herramientas simples como el pedido, la experiencia de paz y fuerza interna, el trabajo con el guía interno y el autoaprendizaje, donde se habilita espacios y diversos dispositivos para que los niños y jóvenes dirijan su interés y desplieguen su intencionalidad en diversas materias del conocimiento. También precisó que dicha propuesta trabaja con aulas multigrados y en espacios sin estímulos. En dichas aplicaciones se ha podido ver indicadores de logro, como el desarrollo de la intencionalidad de los estudiantes habilitando sus potencialidades, motivados por el autoaprendizaje. La habilitación en la afectividad como herramienta de apertura en uno mismo, en el conjunto y como base de todo aprendizaje. La incorporación del contacto interno y desarrollo personal, así como la reducción progresiva de la violencia por grabación de estados de relajación y técnicas simples de internalización que han incorporado como herramienta en su vida diaria. La última modalidad –llamada transversal- está en proceso de aplicación a través de un Programa de Formación Docente en dicho enfoque, que se lleva adelante en coordinación con la UGEL 7, Municipalidad de Miraflores y Copehu Perú, donde son los mismos educadores que van implementando dicha pedagogía y dan testimonios de los avances.

El Programa de Formación culminará en agosto con una Jornada Intergeneracional en el Parque de Estudio y Reflexión Ihuanco.

El Simposio terminó recogiendo las opiniones de los participantes y se dieron las siguientes conclusiones:

“En el acto de educar y aprender es fundamental el desarrollo integral de los centros de respuesta del psiquismo humano; la importancia de la experiencia interna/espiritual en la configuración de un futuro querido; la necesidad de fortalecer, en educadores y estudiantes, ese centro interno para aquietar el ruido, y desde estas condiciones poder desplegar la intencionalidad; de constituir espacios de intercambio entre quienes vienen bregando por transformar el futuro de la educación; de destacar los actos humanos no violentos e ir desarrollando una actitud de vida no violenta, así como enfrentar el reto de pasar del constructivismo al aprendizaje intencional”.

COPEHU
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