La transformación de lo viejo a lo nuevo.

Hoy la nueva Constitución en Chile, resalta, potenciando un hecho permanente en nuestras vidas en lo social y personal, nos referimos al cambio.

En este texto, por cierto, se destacan cambios que acercan el futuro que necesitamos para contar con una vida más digna. Nos referimos aquellos cambios que dan un salto importante en el “sentido común” con el que apreciamos nuestra forma social y personal de vivir, por ejemplo, la paridad de género; el reconocimiento de la diversidad humana; el cuidado de personas que necesitan asistencia para vivir, como trabajo reconocido como tal; el agua cómo bien común y no como bien transable; la participación directa en proyectos legislativos desde la ciudadanía.

Hay muchos factores importantes para relevar en la nueva Constitución chilena, el texto como tal, las innovaciones, y también el modelo de proceso participativo, que fue muy legal, muy normado.

Las derechas en Chile exacerban el miedo a lo desconocido para darle base a su opción, produciendo trastornos adaptativos en la población e inseguridades que en nada ayudan al camino que una sociedad necesita recorrer en su construcción de futuro.

Siempre estamos cambiando aunque no se quiera, los que temen a los cambios es porque piensan que en su vida estos no existen, queriendo conservar un presente en un acto imposible.

El cambio es lo más importante en la vida, ya que representa una constante transformación.

Nos permite salir de la zona de confort, aceptando que lo único constante es el cambio (como dijo Heráclito, 500 años antes de Cristo). Lo recomendable es no resistirse al cambio, ya que lo único que no cambia es el permanente cambio.

¿Qué implica el cambio en la vida? Los cambios permiten oportunidades, aprendizaje, movimiento, ilusión, esperanza y posibilidad de evolución. Los cambios son siempre positivos.

Necesitamos no temer a la incertidumbre; ya que ella, por ejemplo, es la que motiva a los aventureros. Si no fuera por el sentimiento de incertidumbre y por el amor a lo desconocido, no habríamos como humanidad descubierto nada; ni hubiéramos logrado nuevas metas.

Un cambio positivo no sucede por arte de magia, necesita una transformación radical de mentalidad. Esto no lo hacemos solos, lo hacemos con otros, es una experiencia conjunta.

Ser más flexibles involucra cambiar nuestra actitud y enfoque hacia el cambio. Esto va unido a una necesidad, es una experiencia vital. Los cambios suelen implicar dejar atrás algo conocido para adentrarse en algo nuevo. Chile apoyará el Apruebo en el plebiscito de salida del 4 de septiembre, porque esta opción, es la que abre la puerta al cambio anhelado.

Como dice el refrán, cuando soplan vientos de cambio, algunos construyen muros; otros construimos molinos.

Y como lo entonan las voces de nuestras artistas chilenas: “Del blanco y negro al color se convirtió” y “El mundo está cambiando, nosotres también!! “

 

Redacción colaborativa de Gladys Mendoza, Guillermo Garcés y César Anguita. Comisión política.