Según proyecciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se estima que el desempleo juvenil ascendió a un 23 por ciento en el año 2020.

Fuente: Servindi.

Un nuevo informe realizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) estimó que el alto número de jóvenes sin empleo a nivel mundial es una de las consecuencias de la pandemia por la COVID 19.

Desde que se declaró la emergencia sanitaria por esta enfermedad gran cantidad de jóvenes, entre los 15 y 24 años, fueron despedidos de sus trabajos, superando una tasa de desempleo mayor a grupos de edad más avanzado.

Por ejemplo, la escasez de ofertas laborales para jóvenes con respecto al 2019 ascendió al 8,2 por ciento en 2020, mientras que en el caso de los adultos ascendió a menos de la mitad.

Esto se dio debido que desde el inicio de la pandemia la gran mayoría de empresas prefirieron retener a los trabajadores y no buscar nueva mano de obra joven.

 

“Sabemos que la pandemia del COVID-19 ha causado estragos en los mercados laborales para jóvenes en todo el mundo”, dijo Martha Newton, directora general adjunta de Políticas de la OIT.

El último informe titulado “Tendencias mundiales del empleo juvenil 2022: invertir en la transformación del futuro de los jóvenes” señala que la cantidad de  jóvenes sin empleo o educación aumentó en un 23,3 por ciento en el 2020. 1,5 por ciento más que en 2019.

De acuerdo al documento, estas cifras de desempleo no se veían hace 15 años.

Newton declaró que esta situación es un peligro a largo plazo para los jóvenes que han sufrido laboralmente las consecuencias de la pandemia.

“Este grupo de jóvenes corre un riesgo especial de que sus oportunidades y resultados en el mercado laboral se deterioren también a largo plazo, a medida que se afianzan los efectos de ‘cicatrización’ (de la COVID-19) ”.

Sin embargo la desigualdad de género también es transversal al hablar de desempleo juvenil.

El documento detalla que históricamente en Latinoamérica el desempleo ha sido siempre mayor en mujeres que en hombres y la pandemia solo empeoró dicha tendencia.

Por otro lado la brecha de género es mayor en los países de renta media-baja, con un 17,3 por ciento, y menor en los países de renta alta, con un 2,3 por ciento.

A nivel mundial se proyecta que en el 2022 menos de tres de cada diez mujeres jóvenes conseguirá empleo, a comparación de los hombres donde se estima una cifra de más de cuatro de cada diez.

Se espera una recuperación para el 2022

La OIT estima que para este año se espera que la oferta laboral juvenil aumente, pero manteniendo todavía más de 1 punto porcentual por debajo respecto a las cifras del 2019.

Asimismo las cifras proyectan que el desempleo juvenil descenderá hasta los 73 millones en 2022, lo que supone 6 millones de jóvenes por encima del 2019.

Un factor importante a tomar en cuenta es la diferencia entre países con mayores y menores ingresos.

Por ejemplo, solo en América Latina no se proyecta un panorama favorable ya que se estima que la tasa aumente y llegue solo al 20,5 por ciento.

Fuente foto: Diario oficial El Peruano.

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