Por Alicia Muñoz

El domingo 27 de octubre serán las elecciones de gobernaciones, alcaldías y demás servidores públicos del país.

Los colombianos saldrán a ejercer su derecho al voto y se espera una gran participación en las urnas; son alrededor de 36 millones de colombianos y colombianas mayores de edad que pueden votar según el último censo electoral, y se invita a la participación de extranjeros residentes en el territorio nacional, para que elijan los próximos mandatarios para los periodos 2020-2023.

En el país se ha incentivado a los nacionales para que salgan a participar en la democracia colombiana con diferentes beneficios como: medio día libre de trabajo sin importar que la empresa sea pública o privada, reducción en costo de matrícula en universidades públicas del 10%, descuentos en trámites de documentos como por ejemplo en el valor del pasaporte, beneficios de vivienda en los concursos que se realizan para subsidios (se tendrá en cuenta a los que presenten el certificado electoral que se entrega en las mesas de urna), servicio militar más corto y además mejores posibilidades para acceder a cargos públicos (en las convocatorias que se realizan para cargos públicos en el país se dan puntos extra con el certificado).

Desde que empezaron las campañas para las elecciones políticas se prendieron las alarmas, pues los registros presentados son: 7 candidatos asesinados, 42 han sido amedrantados y se han presentados 82 muertes en eventos políticos, ante tal escenario se pensó cerrar las elecciones en las partes más convulsionadas del país. A pesar de la polarización que se ha visto en los últimos años, las muertes y amenazas se han presentado en todos los partidos, además otra fuerte problemática que se ha denunciado es la corrupción y compra de votos de diferentes representantes. Falta aún mucha educación e información en el país para que estos hechos no se presenten pues la gente aún vende su voto por unos15 dólares lo que resulta indignante para muchos colombianos que creen que en la democracia puede estar la solución ante tanta violencia que ha sufrido Colombia por años.

En las principales ciudades como Bogotá, Cali y Bucaramanga las encuestas han estado muy reñidas entre los participantes. En Medellín se ve el fuerte apoyo al candidato del uribismo Alfredo Ramos y en Barranquilla el 70% de aprobación lo tiene Jaime Pumarejo “el candidato de la Familia Char” a quienes se les conoce por fuerte corrupción y por tener el gran poder que ejercen en el caribe colombiano.

En Bogotá el escenario parece ser alentador para la oposición, la medición muestra empate entre Carlos Fernando Galán político, periodista y ex senador, hijo de Luis Carlos Galán (candidato presidencial, asesinado en 1989 tras haber creado una ley que condenaba el narcotráfico); se separó del partido Cambio Radical por el apoyo que tuvo esté en la segunda vuelta de elecciones presidenciales de actual presidente Iván Duque y por la corrupción existente en el partido, ahora se define como independiente, sin embargo a recibido críticas por haber apoyado anteriormente la alcaldía del actual alcalde de la capital Enrique Peñalosa quien tiene muy poca popularidad en la ciudad y al político German Vargas Lleras; por otro lado está la candidata Claudia López politóloga, ex senadora y fórmula presidencial de Sergio Fajardo en 2018, hija de una maestra y al igual que Galán se le critica haber apoyado anteriormente a Peñalosa, a lo que en repetidas ocasiones a mencionado que se separó hace mucho de él por hacer parte del partido que la amenazo par veces por haber denunciado y metido a la cárcel a políticos corruptos de este.

El cargo por elecciones populares más importante después del presidente es el de la Alcaldía Mayor de Bogotá, donde la izquierda en las elecciones presidenciales tuvo gran mayoría de votantes. En los últimos años se ha visto un incremento importante en el número de colombianos que salen a votar, se espera gran participación en estas elecciones.

El escenario aún es incierto y en ciertas regiones del país se ve aun el fuerte apoyo a partidos que han sido criticados por su corrupción, pero por otro lado algunos tienen esperanza puesta en algunos líderes políticos que puedan promover la paz y la no violencia en Colombia.

A lo largo y ancho del país se han hecho publicaciones masivas para que la gente salga a votar por quien desee, pero vote. Colombia necesita un cambio y se espera que los representantes políticos que queden estén a la altura de los cambios sociales que se requieren.