Por Sergio Bastías y Germán Rendón

Este domingo 17 de Junio se realizó en Colombia la segunda vuelta de la elección presidencial. Una jornada electoral memorable, en que si bien Duque, el candidato de la derecha, la oligarquía y el Uribismo ganó, el candidato del Movimiento Colombia Humana, Gustavo Petro de centroizquierda y de 58 años, obtuvo 8.034.189 votos equivalentes al 41,8%.
Los humanistas de distintas ciudades de Colombia apoyaron y trabajaron en la campaña de Petro. Una vez conocidos los resultados, comentaron para Pressenza:
Isabel Echeverri, de la ciudad de Armenia, señala: «Doy las gracias al Doctor Gustavo Petro porque a partir de sus discursos aprendí historia, geografía, sobre movilidad, economía y tantos otros temas. Fueron ocho millones de votos impecablemente ganados, sin almuerzos, sin los cincuenta mil, sin las mentiras de ultratumba ni las rifas, juegos o espectáculos… Son ocho millones de conciencias que sé que le van a aportar al país para una Colombia más humana».
Anthony Villar, de la ciudad de Barrancabermeja, declara: «Lo urgente es crear conciencia por la Paz; pero también es necesario despertar la conciencia de la No Violencia Activa que nos permita rechazar no sólo a la violencia física, sino también toda forma de violencia económica, racial, psicológica, religiosa y de género. Desde luego, aspiramos a que esta nueva sensibilidad pueda instalarse y conmover las estructuras sociales, abriendo el camino para la futura Nación Humana Universal. El movimiento humanista hace un llamamiento a todas las personas a sumar esfuerzos y tomar en sus manos la responsabilidad de cambiar nuestro mundo, superando la violencia personal y apoyando cada quien en su ámbito más próximo, el crecimiento de esta influencia positiva.
Por primera vez en la historia se hace carne la idea de una Colombia humana. Esta magnitud nace del corazón de la gente y se pone en marcha por iniciativa de los mismos partícipes. La verdadera fuerza de este impulso nace del acto sencillo de quien por conciencia adhiere a una causa digna y la comparte con otros».
Diana Hernández, desde la ciudad de Bogotá, nos indica: «Somos ocho millones de personas libres, por la Colombia Humana».
Para Juliana Bernal, que vive en Medellín: «Sin duda hay un proceso que comenzó y de aquí en más, nada lo detiene!».