Ayer comentábamos que a medida en que nos acercamos al 19 de noviembre, Chile entero se va llenando de propaganda electoral, en un despliegue colorido que busca dar a conocer a los candidatos y sus respectivas propuestas. Dábamos cuenta además de algunos testimonios muy honestos y sentidos que se van difundiendo por las redes sociales. https://www.pressenza.com/es/2017/10/los-testimonios/

Sin embargo las campañas no son sólo eso. Una elección se enfrenta con ideales, con las mejores aspiraciones para el conjunto de la sociedad, con proyectos políticos que encarnan en personas, con propuestas concretas. Y entre la gente que toma una u otra posición, al interior de los conglomerados, se van dando relaciones de camaradería, de afecto, de militancia compartida que hermana profundamente, vínculos de pertenencia que a veces son más fuertes que los lazos propios de otro tipo de relaciones.

Ese clima, de hermandad y esperanza, se respira en eventos más internos en los que no sólo se comparte la comida sentados juntos a la mesa, sino también se aprovecha para aportar con recursos económicos que hagan posible llegar hasta el día de la elección con materiales, afiches, volantes y letreros callejeros, a fin de poder dar el último push de difusión.

Ese ambiente, distendido, fraterno, cómplice y entusiasta, se respiraba anoche en la cena organizada por los dueños del restaurante The Roof, en Santiago, para recaudar fondos para la campaña de Tomás Hirsch.

El foto-reportaje es de Juan Guillermo Ossa: