Por Carla Zambrano/ Foro de Comunicación para la Integración de NuestrAmérica -FCINA

Hace nueve años el Banco del Sur nació con el acompañamiento de varios presidentes de la región que impulsaron este esfuerzo de integración económica y financiera soberana. A pesar de las trabas impuestas por el sistema monetario Bretton Woods, América del Sur ha logrado superar los obstáculos para consolidar este importante proyecto que se encuentra a 30 días de elegir a su presidente para iniciar el proceso de captación de aportes que han prometido los diferentes países que integran la institución.

En entrevista con el Foro de Comunicación para la Integración NuestrAmérica (FCINA), el director ejecutivo para Ecuador de la institución y ministro Coordinador de Conocimiento y Talento Humano de ese país, Andrés Arauz, señaló que el proceso de consolidación del proyecto ha sido relativamente rápido y que América del Sur se encuentra a pasos de financiar su propio desarrollo soberano sin las condiciones que han sido tradicionalmente impuestas desde el Norte a lo largo de los últimos 70 años.

FINANCIANDO LA SOBERANÍA DE AMÉRICA DEL SUR

Arauz detalló que el Banco del Sur ha logrado concretar un cronograma de aportes de los países miembros y de sus instituciones que permitirá construir un músculo financiero que lo consolidará como una iniciativa fuerte para el impulso de cinco elementos clave para el desarrollo soberano de América del Sur. Entre estas prioridades destaca la inversión de proyectos relacionados con la soberanía alimentaria de los pueblos para “eliminar las dependencias que tiene todavía nuestra región a pesar de ser un productor excedentario”, dijo.

En segundo lugar, el Banco del Sur se concentrará en el impulso de la soberanía sanitaria para que la región pueda producir sus propios medicamentes y vacunas. Otro punto que abarcará la entidad bancaria será la soberanía energética, a fin de invertir en infraestructuras que interconecten a los distintos países a través de obras de envergadura. También se priorizará la soberanía sobre los recursos naturales fomentando la industrialización para que América del Sur deje de ser un simple exportador de materias primas y se inserte dentro del parque industrial mundial.

Por último, la institución priorizará el financiamiento de iniciativas relacionadas con el conocimiento, la tecnología, la ciencia, la cultura y la educación. El propósito será lograr enlaces entre los investigadores de las distintas universidades de la región para “poder encontrar soluciones a través de este conocimiento”. Refirió que al momento el Banco de Sur tiene en agenda cerca de 300 proyectos previamente presentados por los distintos Consejos que conforman la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) que potenciarán la integración regional.

Sobre este punto, Arauz agregó que el proyecto Fondo de Conocimiento del Sur presentado por Ecuador se encuentra adelantado. A través de esta iniciativa se constituirá un fidecomiso administrado por el Banco del Sur donde no sólo estarán los cinco países miembros de la entidad sino también los 12 países que conforman Unasur. Los miembros del Consejo de Ciencia y Tecnología de la Unasur tienen una agenda de financiamiento a estudios de investigación y de pre factibilidad para las cinco soberanías mencionadas.

“Se investigaría sobre la red ferroviaria de Suramérica. Pre factibilidades para la producción de medicina, también tenemos otros proyectos que se han dado en el ámbito binacional. Por ejemplo, entre Ecuador y Bolivia se estudia la producción de un vehículo eléctrico con baterías de litio boliviano. Eso es un proyecto que requiere investigación científica”, acotó.

CÓMO FUNCIONA EL BANCO DEL SUR

Arauz explicó que el Banco del Sur es una organización colectiva que busca una propia institucionalidad dentro de la banca de América del Sur. En ese sentido, funcionará como una cooperativa de ahorro y crédito a través de la cual los países miembro aportarán los recursos para financiar el desarrollo de sus países a través de reglas y prácticas ajustadas a las prioridades de la región. Cabe acotar que esta institución no solo financiará a los Estados miembros, a los países de la región y a los ministerios, sino que prestará apoyo a entes cooperativos, asociativos y a las organizaciones de la economía popular y solidaria para poder dinamizar las economías del pueblo.

El ministro indicó que tanto los Estados nacionales y las organizaciones de economía popular pueden presentar sus proyectos en el Banco del Sur. Luego del proceso de calificación, el cuerpo directivo de la entidad bancaria evaluará la dimensión técnica y financiera para la aprobación del proyecto. Destacó que para los casos de endeudamiento de los países miembros no se requiere necesariamente garantía soberana debido a que el banco operará con una lógica comercial. Refirió que hasta el momento la mayoría de los proyectos que se van a presentar están vinculados con la lógica de desarrollo y satisfacción en la línea de las cinco soberanías.

PAÍSES MIEMBROS

Hasta el momento cinco países han ratificado su adhesión al Banco del Sur: Argentina, Bolivia, Ecuador, Uruguay y Venezuela; otros dos países signatarios: Brasil y Paraguay, se encuentran evaluando la ratificación de la iniciativa en sus cámaras legislativas. Sin embargo, continúa abierto el llamado a todos los países a sumarse, en ese sentido se han extendido invitaciones a Surinam, Guyana, Colombia, Perú y Chile, dijo el ministro ecuatoriano.

Para Arauz es importante que los suramericanos tengan interés en el Banco del Sur por cuanto serán los beneficiarios directos de esta iniciativa. Recordó que más de un billón de dólares de los países de la región están depositados en la banca de los Estados Unidos. La principal tarea de la entidad será traer una parte de este dinero para colocarlo en créditos que beneficien y dinamicen la economía de América del Sur a través de financiamientos a empresas y cooperativas, lo cual redundará en más empleo y comercio para las sociedades del continente.

SOSTENIBILIDAD Y FORTALEZA INSTITUCIONAL

Arauz comentó que el Banco del Sur “no es un mero acuerdo o un intercambio de palabras entre presidentes”, sino un compromiso desarrollado en el marco de un acuerdo internacional entre los Estados miembros que ha cumplido con las exigencias de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para su puesta en funcionamiento. De tal manera, aún cuando los gobiernos de los países que lo conforman cambien, el Banco del Sur continuará sus operaciones y quedará consolidado como una institución internacional.

Sin embargo, el banco deberá enfrentar fenómenos sociales como la mentalidad colonialista que aún se encuentra presente dentro de las instituciones de América del Sur. Muchos funcionarios piensan que “solo es bueno lo que viene del Norte, razón por la cual no son apoyadas las iniciativas suramericanas por instancias burocráticas por no contar con el aval de una institución del Norte”, comentó el director ejecutivo/Ecuador del Banco del Sur.

El llamado de Arauz es a permanecer alertas por cuanto la banca internacional montada sobre la vieja arquitectura financiera buscará frenar el avance de iniciativas como la del Banco del Sur que busca “reciclar nuestro propio ahorro para financiar a nuestros pueblos y países. Ellos buscan seguir jalando ese ahorro a los países del Norte, ese es uno de los principales elementos a confrontar”.

Escuchen la entrevista en audio: http://archivo.aler.org/s/Pz99hh0bwXUYu5s/download

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