Pressenza, como agencia que promueve el humanismo, la no-violencia, los derechos humanos, la no-discriminación y el desarme, no solo difunde noticias que fortalecen esa mirada en el mundo de hoy, sino que también promueve la formación del público lector y especialistas en medios de comunicación para fomentar esa mirada. Es por ello que también organiza y desarrolla cursos de capacitación a periodistas en coordinación con centros de formación, como los desarrollados recientemente en las ciudades de Quito (Ecuador) y Huancayo (Perú). Conversamos con la Presidenta de Pressenza, Nelsy Lizarazo, acerca de estos proyectos.

Pressenza: ¿Podrías describir los objetivos y contenidos claves de estos cursos? ¿Con quiénes se han desarrollado hasta el momento?

Nelsy Lizarazo: Creo que para comprender el interés e importancia de estas propuestas de formación es necesario precisar los puntos de partida que nos movilizan a fortalecer nuestro trabajo en el campo de la comunicación y la información.

El primero de ellos es que, desde nuestro punto de vista, la comunicación es, junto con la educación, un campo de disputa estratégica de sentidos. Sin una transformación profunda en el sentido de la educación y en el sentido de la comunicación… es decir, sin otra respuesta a la pregunta ¿para qué educamos y para qué comunicamos?, las transformaciones culturales que necesitamos como especie humana en este momento de la historia, no son posibles. ¿Por qué? Porque es en estos dos campos, pilares de las culturas e identidades, donde nos jugamos otro modo de comprender al ser humano, al mundo, a las comunidades, a la vida misma.

El segundo, por supuesto relacionado con el primero, es que la comunicación es hoy, finalmente de modo explícito, uno de los campos más conflictivos en nuestras sociedades. Tiene que ver, sin duda, con la comprensión cada vez más clara de lo que realmente significa la comunicación y el manejo de la información en la construcción democrática de nuestras sociedades.

Dicho lo anterior, se comprende que para Pressenza, abrir espacios y oportunidades para compartir con estudiantes y profesionales de la comunicación y el periodismo nuestro enfoque, este enfoque que denominamos de paz y no violencia, se vuelve fundamental. Entregar criterios y herramientas concretas para trabajar agendas y contenidos que contribuyan de modo claro y contundente a la construcción de un discurso informativo de carácter no violento, que apunte en la dirección de la convivencia solidaria, la no–discriminación, el repudio a toda forma de violencia y, al hacerlo, multiplicar las posibilidades de que muchos profesionales del mundo de la comunicación opten por desarrollar su práctica desde esta óptica, son los dos objetivos centrales de este esfuerzo.

Sobre contenidos:

En cuanto a contenidos, nuestros cursos han trabajado fundamentalmente tres líneas de contenido:

  • Criterios y herramientas periodísticas del enfoque de paz y no violencia: referidos a selección temática, tratamiento informativo, uso del lenguaje, etc.
  • Temáticas centrales del enfoque de paz y no violencia: interculturalidad, no discriminación, movimientos sociales, base social, política, migración y refugio, son algunas de estas temáticas.
  • Elementos para trabajar sobre la propia mirada: herramientas de trabajo interno que contribuyan a que cada estudiante y/o profesional del periodismo desarrolle una nueva mirada de sí mismo y de la realidad.

Sobre destinatarios:

Hasta el momento hemos desarrollado tres experiencias:

  • En junio de 2015, con dos grupos de periodistas de medios públicos y privados de Quito y Cuenca, en asocio con CIESPAL. Los talleres desarrollados se denominaron “La reconciliación también es noticia”. Como sabemos, un tema central de nuestro trabajo desde la no violencia activa es, justamente, la reconciliación, tema por demás ausente en los medios convencionales (por llamarlos de algún modo).
  • En el segundo semestre del 2015, en Huancayo, una serie de charlas virtuales “Encuentros de comunicación por la paz y la no violencia”, seguidas por talleres, dirigidas especialmente a jóvenes estudiantes de comunicación, en coordinación con el Ministerio de Cultura – DDC Junín, el Colegio de Periodistas Junín – Huancavelica y Pressenza.
  • Y recientemente, entre los meses de junio y julio, hemos desarrollado el Curso Abierto: Enfoque y Agenda para un periodismo de paz y no violencia, en el marco del convenio de Pressenza-Ecuador con la Universidad Politécnica Salesiana. Este curso estuvo dirigido a estudiantes de comunicación de primer semestre.
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“Periodismo en época de conflicto: la reconciliación también es noticia”, Quito, Ecuador.

P: ¿Han utilizado diferentes modalidades para el desarrollo de este proyecto de formación?

N.L.: Hemos combinado tres modalidades: conferencias virtuales, apoyándonos en expertos en las diferentes temáticas, voluntarios de Pressenza o de otras iniciativas y organizaciones humanistas; talleres presenciales, para profundizar y aplicar los criterios y herramientas propiamente periodísticos o para compartir herramientas de trabajo personal; paneles y conversatorios, de carácter más público, en los que también participan los estudiantes, para poder abrir otras temáticas de la agenda periodística de paz y no violencia con la que trabaja Pressenza.

P: ¿Cuál es el enfoque que se da a estos talleres o cursos?

N.L.: Sería muy extenso desarrollar todo el enfoque que le damos a estos talleres, pues se trata del enfoque de paz y no violencia que orienta el quehacer de Pressenza desde su origen. Por tanto, destaco cuatro elementos centrales que están siempre presentes:

  • La urgencia de poner en valor, visibilizar y “volver noticia” todo aquello que anuncia el futuro que está entre nosotros: iniciativas de solidaridad, de no discriminación, de reconciliación, de resolución no violenta de conflictos, de economía solidaria, de otras prácticas comunitarias y políticas, son tema y prioridad para Pressenza y lo son en un enfoque de paz y no violencia.
  • La necesidad de “evidenciar” la raíz de los conflictos, de “desnaturalizar” situaciones que aparecen como “destino inevitable”, de situar responsabilidades y no culpabilidades, de mostrar las relaciones entre los hechos y de poner en contexto las situaciones, son elementos claves del enfoque con el que trabajamos, tanto en el día a día de Pressenza, como en los cursos que hacemos.
  • La prioridad de trabajar en torno a la diversidad, a todas las diversidades, como una riqueza, como un valor. Sin el reconocimiento y valoración de la diversidad, la superación de la discriminación, una de las raíces más profundas de todas las violencias, no será posible.
  • La responsabilidad de asumir la propia mirada del comunicador o el periodista, su propia subjetividad como el lugar desde el cual elige temas, trata los hechos, interpreta realidades y por ello, la centralidad de trabajar esa subjetividad, esa mirada y de explicitarla claramente y sin tapujos, como una clave de la ética periodística.

P: ¿Cuál es tu evaluación de la recepción de estos cursos? ¿Qué beneficios consideras que han obtenido los participantes?

N.L.: Yo diría que el primer gran beneficio es que, sin importar si son profesionales, estudiantes de niveles avanzados o estudiantes que inician, estos cursos definitivamente les abren a todos los participantes un camino nuevo para su tarea profesional. Otra mirada de la comunicación y el periodismo, otras posibilidades e ideas, otras formas posibles y concretas de tratar la información, generar noticia y opinión, interpretar la realidad.

Por otra parte, como los propios participantes lo han expresado en cada oportunidad, se trata de un espacio donde no solamente se adquieren nuevos criterios y herramientas para la tarea comunicativa, sino para la vida personal, para transformar las relaciones en sus entornos más cercanos, para mirar de otra manera el mundo, a sí mismos y a los demás.

Finalmente diría que, si lográramos influir en la formación de los comunicadores y comunicadoras en cada vez más escuelas de comunicación, cada vez más medios, cada vez más espacios, sin lugar a dudas las posibilidades de difundir otros sentidos del mundo, de la vida, de los seres humanos en todo el planeta, desde la comunicación, marcarían un aporte posiblemente determinante en la dirección de nuestras sociedades en este momento tan complejo y tan interesante de la historia de la civilización humana.

Más información en las siguientes publicaciones de Pressenza:

La reconciliación también es noticia: talleres en Ecuador

Lo que no es contado y los que no pueden contar