Por Débora @mabaires

En el día de ayer, los argentinos fuimos testigos de un show televisivo en el que los dos candidatos a presidente que se enfrentarán el próximo domingo en la 2º vuelta, intercambiaron palabras.

No sería justo llamarlo «Debate» ya que ninguno de los dos fue un espadachín de la palabra, que pudiera herir nuestros prejuicios o lograse hacernos pensar en sus propuestas.

A decir verdad, propuestas se escucharon pocas, y las que todos conocemos. Nada nuevo.

El Show llevado a cabo por la  ONG Cippec , relacionada con el PRO y más específicamente con la esposa de Domingo Felipe Cavallo, Sonia Abrazián; se realizó en el aula magna de una universidad pública (y gratuita, aunque a Macri no le guste).

Fue televisado con un acuerdo previo entre los equipos de asesores de ambos candidatos.

Y todo estaba tan previsto y ensayado, que me dolió ver a dos candidatos presidenciales, actuando frente a un auditorio y ante las cámaras de Tv.
Pero más me dolió ver a sus esposas, haciendo de «partenaires» hacia el final del show.
Un espectáculo lamentable, que rebaja a mera figura decorativa a estas dos mujeres. 

A decir verdad, fue  pésima la iluminación del lugar. Si hubiera estado María Rosa Martínez, alias Mirtha Legrand, hubiera dicho «así, no… » y hubiera soltado un par de epítetos.

Para el show televisivo, los organizadores se opusieron a que en representación de la Tv Pública fuera la periodista Cecilia Laratro, quien tiene una impecable labor profesional desde hace más de 30 años; porque no querían mujeres.

La misoginia de los organizadores, les recuerdo, la ONG vinculada al PRO,  también muestra una faceta que permanece invisibilizada ante la sociedad, y como no es relevante para el debate, pasó sin pena ni gloria.

Pero es información valiosa, que se suma a lo que ya conocemos de Mauricio Macri y su núcleo duro.

Tal vez no sea tan casual el cierre de la oficina de atención a las víctimas de violencia sexual; ni la connivencia con el proxeneta y tratante Raúl Martins y  la persecución a Lorena Martins por parte de personajes de la Famiglia Judicial, que responden al candidato procesado, como el juez  Oyarbide, o el fiscal  Pollicita.

Los dos minutos de Macri

En su exposición Mauricio Macri se comprometió en sus dos minutos (si es que alguna idea política o propuesta de gobierno puede hacerse razonablemente en ese tiempo) a luchar contra la inseguridad, contra la trata y contra el narcotráfico.

Hábilmente, usó en reiteradas oportunidades la figura del Jefe de Gabinete Aníbal  Fernández . Contra él se había calumniado en  una operación mediática organizada por el Grupo Clarín, por Elisa Carrió y por algún personaje del FPV que colaboró con la farsa; instalando la idea de que era el dueño de la droga en el país. Pero además, el PRO utilizó esto como eje de la campaña en Provincia de Buenos Aires, tanto en los llamados telefónicos, como en los militantes que timbreaban en los domicilios, elegidos con minucioso análisis de sus perfiles de Facebook.
La progresión geométrica de la difusión, hizo el resto. Aníbal Fernández logró ganar la interna del FPV, pero no la gobernación.

El ataque feroz, que prendió en el inconsciente colectivo, fue utilizado anoche hábilmente por los asesores de Mauricio Macri, y por eso, lo nombró varias veces antes de referirse a la inseguridad, y al «flagelo de la droga y del paco».

Lo que sigue es la transcripción textual de lo dicho por el candidato procesado Mauricio Macri: 

«No estamos viviendo en la Argentina con la tranquilidad que solíamos hacerlo. Lamentablemente, pensamos por dónde vamos, a qué hora salimos, nos preocupa cuando nuestros hijos salen de noche, estamos con las rejas, sabemos que corren peligro nuestros hijos por un par de zapatillas, por un celular. Lo que yo les quiero pedir esta noche es que no nos resignemos a vivir detrás de las rejas, que realmente volvamos a trabajar juntos para recuperar la tranquilidad y la paz. Yo les quiero proponer, que es una de mis tres propuestas, es enfrentar y derrotar el narcotráfico, que ha potenciado, que ha aumentado la violencia y la cantidad de delitos en la Argentina. Después de diez años de inacción, diría yo de complicidad del Gobierno Nacional, que se la ha pasado negando esta realidad, la verdad es que nos ha afectado a todos. Y yo creo que hay que hacerlo con más inteligencia que músculo: una Agencia Nacional de Lucha contra el Crimen Organizado, que además trate temas de trata, tráfico de armas, lavado de dinero, corrupción, porque hay funcionarios, hay problemas en la Justicia, en las fuerzas de seguridad, y encarando desde el primer día, tomar control de nuestro territorio. Diez años sin radarizar, sin poner escáners, sin ocupar los ríos, eso tenemos que hacerlo desde el primer día y volver a entrar con el Estado en los barrios más peligrosos para marcar una línea y atacar principalmente el tema del paco, como lo decía hace un instante, que es el peor mal que está destruyendo nuestras familias. Y profesionalizar las fuerzas policiales. Esto que hicimos en la Metropolitana, una fuerza modelo, altamente profesionalizada, hay que hacerlo en todas las fuerzas del país, para trabajar en conjunto y también en red, en una Argentina que deja de tener conflictos con todo el mundo y construye buenas relaciones, trabajar en red con todos los países que también están combatiendo esta desgracia que arruina la vida de todos nosotros, que es el narcotráfico.»

Miente sobre la falta de radarización, ya que eso se hizo y muy bien, según los pilotos y las empresas aerocomerciales que transitan nuestro espacio aéreo.

Me sorprendió lo de «ocupar los ríos» y como no se explayó, desconozco si piensa mandarnos a nadar, si piensa hacer una nueva Vuelta De Obligado (cosa que dudo) o si creerá que todos los ríos del país son navegables… Es una de esas frases efectistas y sin sentido que suelen salir de su boca, sin ton ni son.   

Las tres propuestas son en realidad, una sola, y ya la expuse en un posteo anterior: MILITARIZAR las fuerzas de seguridad.

Y para hacerlo, pretende UNIFICAR todo bajo un mismo ministerio con el nombre de Agencia y a la vez, meter a la DEA, que es la agencia antinarcóticos de EEUU.  ( trabajar en red con todos los países que también están combatiendo esta desgracia que arruina la vida de todos nosotros, que es el narcotráfico»)

Es decir, si uno analiza detenidamente lo que dijo, es lo que EEUU pretende. El control del tráfico de drogas tal como lo tenía en los años 90, con la tercerización del control aeroportuario y portuario en manos de gente vinculada a los militares represores como Donda Tigel, y que luego de la muerte de Alfredo Yabrán, pasó  a ser administrada por gente vinculada a  Frank Holder, agente de la CIA y su lugarteniente Eugenio Ecke (el mismo que, siendo socio de Fabián Picón,  le prestaba el auto a Nisman). Para ver más detalles al respecto de estas relaciones de los 90.

En definitiva, lo que plantea Macri en materia de seguridad es casi lo mismo que decía el candidato Sergio Massa «atacar las fronteras», control del espacio aéreo, aunque Macri no hizo mención a ninguna ley de derribo; pero aclaró lo de ir a meterse en los barrios con la policía militarizada.

En cuanto a lo que dice haber hecho con la Metropolitana, es absolutamente falso.

La policía Metropolitana fue creada por Mauricio Macri, puso a su cargo nada menos que al encubridor de la causa AMIA  Jorge Fino Palacios.

El mismo comisario que había sido exonerado de la Policía Federal por estar vinculado al delincuente Sagorsky que tenía el auto del secuestrado y asesinado Axel Blumberg.

Los dichos de Guillermo Montenegro respecto de la conversación telefónica donde Palacios habla con el delincuente, a pesar de haberlo dicho para aclarar que no tienen validez legal para vincularlo a la causa Blumberg, no dejan lugar a dudas.  Jorge Palacios y el desarmador de autos robados José Sagorsky se conocían desde al menos dos años antes del secuestro y muerte de Axel. 

El mismo Jorge Palacios que montó una red de espionaje ilegal desde la Policía Metropolitana, para escuchar a familiares de Macri; a los de las víctimas de la AMIA; a funcionarios públicos, a periodistas, a dirigentes de fútbol, y al mismo Daniel Scioli.

Por esta causa en particular, está procesado Mauricio Macri.

Y a pesar de haber sido víctima directa de su accionar, el candidato Daniel Scioli, no hizo mención al tema.

Promisoginia
 
Tal vez sea la misoginia típica del espacio político al que pertenece lo que llevó a Mauricio Macri en 2012, a delatar el paradero de una víctima de trata con fines de explotación sexual; que esperaba en un hospital para ser atendida por los médicos; porque iban a practicarle un aborto legal, por las violaciones reiteradas ( legal desde 1926).    

Haber expuesto de ese modo a una víctima de trata de personas, que era madre de tres niños, que había sido secuestrada y violada durante meses, en  el momento más vulnerable de su vida, arrojándole encima, dándoles la dirección y cama del hospital Ramos Mejía donde estaba internada,  a la caterva de ultracatólicos que frecuentan el espacio del PRO y lo financian, como Rodríguez Varela, o Alberto Solanet; fue atroz. Pero como tiene inmunidad mediática; el caso se diluyó rápidamente en si debía o no practicarse el aborto, en la jueza que lo frenó, en la Corte y bla bla bla.

Que el candidato procesado Mauricio Macri además, anduviera de vacaciones en Cancún fotografiándose con su amigo, Gabriel Conde, hijo de un conocido dirigente del Club Boca Juniors, sabiendo que está profugado para la Justicia argentina, justamente por trata de personas, le agrega un condimento más a la decisión de exponer a la víctima de trata de personas.
(Gabriel Conde, regenteaba un  prostíbulo habilitado como «café bar» en la paqueta zona de Recoleta. El antro en cuestión se llamaba Shampoo, y fueron rescatadas mujeres dominicanas y brasileñas, víctimas de la red de trata que dirige Raúl Martins y Jaime Stiuso, entre otros.)

Que en ese boliche de Cancún, frecuentado por Macri y su esposa, al que Lorena Martins denunció también como prostíbulo de su padre, concurrieran como elenco estable miembros del temible Cartel de los Zetas, y que sean socios en la distribución de estupefacientes a través de las redes de Martins, es algo que el candidato procesado tampoco  podría haber desconocido ya que según los registros de los diarios mexicanos, los Zetas se movían en el prostíbulo como los dueños.

Que Mauricio Macri haya hecho su campaña financiado por Raúl Martins, según consta en la denuncia realizada ante la Justicia por Lorena Martins, parece ser un detalle menor, que el candidato del FPV decidió dejar pasar.

Trabajo esclavo

A su lado estaba Juliana Awada, su esposa. Quien está denunciada por utilizar los servicios de talleres textiles clandestinos para coser las prendas que vende con la marca Cheeky , y las de su cuñada (concuñada del candidato procesado) Patricia Fraccione de la marca «Como quieres que te quiera».

Tomando estos dos antecedentes y creyendo en su buena voluntad cuando declaró que el nunca notó nada raro en Cancún, y que desconocía que su amigo Conde estuviera prófugo; la pregunta razonable que uno debiera hacerse es si está capacitado para combatir el narcotráfico y la trata de personas, si cuando la tiene delante, no logra verlas.  

Es evidente que tampoco logra identificar a un esclavista, puesto que se casó con una persona denunciada por ello, dos veces.

No ha logrado en 200 km 2 , resolver el tema de los talleres clandestinos, que encontraron en la Ciudad un lugar perfecto para establecerse.

Y es un problema, no sólo en CABA sino también en Lomas De Zamora, provincia de Buenos Aires,  donde se encuentra la feria más grande de venta de ropa producida en esas condiciones.

En CABA va a los shoppings a esquilmar porteños con precios carísimos. En Provincia, a La Salada, donde se vende muy barata, y la cantidad es abrumadora; ya que hasta vienen desde otras provincias a abastecerse con un aceitadísimo sistema de micros que realizan tours de compras para comerciantes.

El sistema funciona perfecto. Los grandes empresarios del negocio no pagan cargas sociales ni lidian con problemas sindicales. Subcontratan talleristas, que explotan a trabajadores. Si caen por alguna denuncia, el sistema de la mafia judicial los libera inmediatamente.

A la vez, hay otra mafia que organiza viajes, ya sea para comprar, como para traer esclavos desde países limítrofes. Algunos tienen su propia empresa de micros.

Y uno de ellos estuvo sentado junto a Mauricio Macri, cuando, en los hechos del parque indoamericano, presentó a su amigo boliviano de la Asociación Civil Federativa Boliviana,  Alfredo Ayala.

La esclavitud es un problema serio que ninguno de los dos candidatos abordó.    

Otro detalle de la impunidad con la que se maneja Alfredo Ayala en la ciudad de Buenos Aires, es que usa a los esclavos como fuerza de choque contra los denunciantes, o contra cualquiera.
Recordarán uds el incidente en Plaza de Mayo cuando este señor se apersonó con un grupo nutrido de gente y un féretro, con un cadáver dentro.

¿Con quién encabezaron la marcha del 2009? Con Raúl Castells.

El mismo Raúl Castells, que hoy apoya a Mauricio Macri.  

Como vemos, el candidato Mauricio Macri al no poder utilizar la UCEP (Unidad de Control del Espacio Público) para apalear gente, utiliza a quienes invisibiliza socialmente: Barras Bravas de Boca; o esclavistas  textiles.

La seguridad de Daniel Scioli

Puesto  a hablar sobre la inseguridad, el candidato Daniel Scioli, hizo eje sobre tres propuestas concretas, menos espectaculares, pero mucho más efectivas:
«La lucha contra la droga, que es la contracara de la vida, tiene que unirnos a todos. Desde dos lugares: el narcotraficante es un criminal, un problema de seguridad pública, y el adicto es un enfermo, es un tema de salud pública. Por eso mi compromiso, una propuesta que he tomado del candidato del Frente Renovador, Sergio Massa, que todos los bienes decomisados a estas organizaciones sean volcados a centros de recuperación de los adictos.Y otro eje central, el desarme. Yo voy a insistir a los legisladores de todos los partidos políticos que voten la ley que dice del sentido común: el que tiene un arma y no tiene permiso de tenencia y portación en la vía pública, tiene que quedar detenido y no sale, porque es un peligro para el conjunto de la sociedad.»

En un claro posicionamiento social diferente al de Mauricio Macri, está diciendo que el adicto no es quien debe ser criminalizado, sino el narcotraficante.

Y dice más aún: el problema del narcotráfico es un problema de seguridad pública. No habla de defensa nacional, ni de meter agencias extranjeras.

Sin lugar a dudas, no quiere ni cree conveniente, meter a las FFAA a combatir el narcotráfico (algo que por ley está prohibido en nuestro país); ni quiere militarizar a las policías y meterlas en los barrios, donde cada vez que estuvieron,fue peor el remedio que la enfermedad.

Esta diferencia sustancial para alguien que parecía tan similar al otro candidato, le vale mi respeto.

La propuesta de destinar los bienes decomisados para los centros de rehabilitación, también me parece sana, razonable y políticamente correcta,  aunque de difícil concreción. No por él, que tiene todo el empeño y gozará del acompañamiento del bloque de Sergio Massa en el Congreso, sin dudas, ya que le reconoció la idea como suya.  
 
Pero hemos visto, cómo desde el poder judicial, algunos fiscales y jueces encubren a narcotraficantes, por lo que los bienes que pudieran llegar a decomisarse, podrían hacerse efectivos recién cuando esas causas terminen.

Es cierto que empieza a regir un nuevo Código procesal en unos meses, y que los jueces no serán quienes cajonearían las causas a gusto y placer, sino que los fiscales tendrían la investigación de las mismas y los plazos se acotaron.

Pero, y siempre hay un pero,  para evitar esto, la Corte Suprema de Justicia creó una «comisión judicial para combatir el narcotráfico» y mediante la acordada 28/15; le da la misión a este grupo de jueces designados por él, de generar una política de estado para luchar contra el narcotráfico.
 
Créase o no, el rey de la suprema, pollo de Magneto y las corporaciones, inventó una comisión conformada por jueces para decirle al Ejecutivo qué políticas debe implementar. Pero sobre todo, para que aquellas cosas que entren al Ministerio Público Fiscal o a un tribunal, relacionado con el tema pase por esa comisión.

Además parece que se autoproclamó presidente y no nos enteramos. Lo peligroso es que desde el poder judicial, interferirán en cualquier política de estado relacionada con el narcotráfico y los delitos asociados. Pero también ampararán a quienes estén siendo investigados al enterarse los jueces corruptos de las novedades producidas en cualquier juzgado del país.   

Viendo que acompañada de Guillermo Montenegro,  la Jueza Sandra Arroyo Salgado, cajoneadora de las causas de narcotráfico en todo el corredor norte de la provincia de Buenos Aires, amiga personal de Antonio Stiuso, estuvo presenciando el debate, y que ella es miembro de esta fastuosa e inoperante comisión de narcotráfico creada por Lorenzetti y sus dos»umpa lumpa»; todos podemos intuir que les gusta más el plan de Mauricio Macri, de hacer bambolla para que parezca que se hace algo, mientras se sientan a tomar whisky con los traficantes en Cancún.   

Antes de poder contarnos su idea el candidato, y de ser elegido,  las corporaciones mafiosas tendieron sus redes de contención y autoprotección, por las dudas.    

En cuanto a la Ley Nacional de Desarme que propone Daniel Scioli, se trata de una vuelta de tuerca más, a algo que desde el año 2007, con el Plan Nacional de Desarme, se está llevando a cabo y ha sido exitoso.  

Si bien no es algo nuevo, ampliar los alcances todo el territorio con una ley nacional, sacaría de circulación muchos problemas.

El resumen en materia de seguridad:

Macri propone:

La intervención de agencias de inteligencia y seguridad extranjeras  dentro de nuestro país.

Y la militarización de los espacios territoriales de bajos recursos so pretexto de la inseguridad. 

Scioli propone:

Perseguir y encarcelar al narcotraficante

Darle atención  especializada a los adictos y generar los recursos para ello a través del decomiso de bienes a narcotraficantes

Extender a todo el territorio el Plan Nacional de Desarme para sacar de circulación la mayor cantidad de armas posibles.

Según creo, más allá de los chicaneos y de si tenía más linda camisa o la escarapela puesta, lo importante es lo que dicen pero también lo que hicieron. 

No sé cuál será tu opinión, pero yo vi que al candidato de los globos de colores, la revolución de la alegría y del diálogo, se le vieron las plumas.  Y también las garras.

El artículo original se puede leer aquí