Por Edison Burbano @elpayanes

Colombia y su nuevo Congreso

Colombia, la esquina suramericana,  está viviendo un  momento histórico,  entre  cambiar el rumbo del país con la Paz,  la reconciliación social  o  mantener  el “Statu Quo” que mantiene un conflicto social armado que ha durado más de  6 décadas,  generado desplazamiento de civiles , y aumentando la inequidad social, donde los ricos son más ricos y los pobres más pobres.

El Pasado 9 de marzo, se realizaron las elecciones legislativas, para cambiar el Congreso  que  está conformado por  100 Senadores (Diputados) y 200 Representantes a la Cámara.

Según datos de la Registraduría Nacional del Estado Civil con el 98,40 % escrutado, en las elecciones para el Senado se registra una participación de 14,3 millones de personas de los 32,7 millones de votantes convocados (43,58 %), mientras que para la Cámara de Representantes fue del 43,57 %. 

Esto demuestra, que  más del  60%  del pueblo colombiano está cansado de la clase política tradicional,  corrupta que miente  e incumple  las promesa electoreras o están despolitizadas que no les interesa  participar en política.

(Abstención: 57 %  + Votos nulos 3 % +  Votos en blanco: 3% =  63% de ciudadanos inconformes).

Esto pone en duda la verdadera participación del ciudadano en la democracia colombiana, que se dice ser una de la más antiguas y estables del continente.

Según estos datos, una minoría elige a sus mandatarios, esta clase política es electa con recursos públicos, conforman las llamadas “maquinarias  políticas” que compran los voto, manipulan el poder al servicio de intereses particulares, económicos o armados (Paramilitarismo o narcotráfico).

Así queda repartido el nuevo Congreso colombiano:

El partido de la U  21 Senadores (Santos DERECHA)

Centro Democrático 19 Senadores (Uribe  ULTRA – DERECHA)

Partido Liberal 17 Senadores (DERECHA)

Alianza Verde 5 Senadores (Centro)

El partido de izquierda Polo Democrático Alternativo, obtiene 5 Senadores con 541.145 votos, lo que representa 3,78%.

Estos datos reflejan que la minoría que vota en el país, lo hacen por los partidos tradicionales  de derecha, al servicio del modelo económico neoliberal  que ponen en el ajedrez político la lucha de poder entre la derecha y la extrema derecha que juegan ser  gobierno y oposición a la vez y así dominar el país.

Pero se rescata la lucha que hace la izquierda democrática, que a pesar de no haber garantías en el ejercicio electoral, lograron mantener el umbral y no desaparecer en el mapa político, se destaca la elección del Senador Jorge Robledo que sacó su máxima votación. Jorge hace control político, también se destaca la elección como Senador el  defensor de los derechos humanos Iván Cepeda Castro del Polo Democrático Alternativo, que representa a las víctimas del terrorismo de Estado y ha denunciado ante la Corte Penal Internacional al ex presidente, hoy Senador electo Álvaro Uribe Vélez.

Este nuevo congreso electo, aprobará o no las leyes y avances del Proceso de Paz entre el Gobierno de Juan Manuel Santos que aspira a la reelección y la guerrilla de las FARC EP.

Es decepcionante el nivel de fraude que se presentó en estas elecciones legislativas, el partido del expresidente Uribe “Centro democrático” le encontraron varios votos, sin haber participado en algunas regiones del país.

También se denuncia que fue elegida una representante afro, sin ser afro, ni hacer proceso en las comunidades afrocolombianas.

Movilización campesina y popular

Pasadas las elecciones legislativas,  vuelven  las movilizaciones  sociales y populares  en Colombia,, en este caso es la gran asamblea que se realizó los días 15, 16 y 17 de marzo, con éxito en la ciudad de Bogotá,  la llamada “Cumbre Agraria, campesina, étnica y Popular” que reunió a más de 30 mil personas de todo el país, representando a sus comunidades campesinas, indígenas, afros  acompañados de los movimientos sociales y populares

La Cumbre Agraria definió que la unidad es el camino de la justicia social, para enfrentar las políticas de los gobiernos neoliberales y  se  aprobó un pliego único de peticiones que será   presentado  al Gobierno  del Presidente Juan Manuel Santos,  que de  no haber respuestas y acuerdos  al pliego, convocarán a  un paro nacional agrario en todo el país para la primera semana de mayo

Un líder campesino afirmó: “Si no atienden nuestras peticiones con propuestas para una política estable y duradera para el campo, con soberanía alimentaria nos vamos a las calles otra vez”.

En el pliego de peticiones al Estado se destaca la propuestas de sustitución gradual de cultivos ilícitos en las comunidades a través de la inversión social en ellas por parte del Gobierno.

En el punto de la economía exigen apoyar la soberanía alimentaria y el desmonte de todos los Tratados de Libre Comercio, en especial con la Unión Europea, Corea del Sur y Estados Unidos. Apoyan y respaldan el proceso de diálogos de Paz, en la Habana (Cuba) entre el gobierno y las FARC EP, como la única salida para poner fin a más de 60 años de conflicto social y armado que se vive en el país y así construir una democracia real con justicia social.