El próximo presupuesto del presidente estadounidense, Barack Obama, incluirá recortes en la Seguridad Social (Medicare) y el aumento de impuestos, su objetivo: llegar a un acuerdo con los republicanos sobre la reducción del déficit para poner las finanzas del país sobre una base más sólida.

El presupuesto incluirá el compromiso hecho el pasado mes de diciembre por Obama al presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, según informaron altos funcionarios norteamericanos el jueves.

La medida del mandatario de Estados Unidos recortaría el déficit en 1,8 billones de dólares durante diez años.

“El presupuesto del presidente, que será presentado el miércoles, muestra cómo podemos invertir en las cosas que necesitamos para hacer crecer nuestra economía, crear empleos y fortalecer la clase media, mientras se reduce aún más el déficit de una manera equilibrada”, dijo un alto funcionario del Gobierno.

Para el Seguro Social, Obama planea proponer un cambio en un concepto llamado “Chained CPI (Índice encadenado de precios al consumidor)”, que es una fórmula para la inflación.

Los defensores dicen que el IPC encadenado es una forma más precisa de medir la inflación, respecto al sistema actual que exagera el crecimiento de los precios de consumo.

Los recortes masivos al presupuesto, que continuarán hasta el uno de octubre, son fruto de un pacto acordado en agosto de 2011 por el Congreso, que buscaba la elevación del techo de la deuda a cambio de elaborar un plan para la reducción del déficit que no se logró.

Una encuesta realizada por el Instituto norteamericano ‘Gallup’ demuestra que el 44 por ciento de los estadounidenses está en contra de la puesta en marcha de los recortes presupuestarios.