Los chilenos acudirán el domingo a las urnas para elegir alcaldes y concejales de 345 comunas en elecciones municipales, los primeros comicios en Chile con voto voluntario y un padrón con cinco millones más de potenciales votantes, fruto de una nueva ley de inscripción automática.

Por primera vez, los electores chilenos que no quieran o no puedan ir a votar, no serán multados. La recientemente aprobada ley de voto voluntario e inscripción automática será puesta a prueba en estos comicios, en los que reina la incertidumbre sobre la participación electoral.

El padrón electoral también se vio aumentado por la inscripción automática a partir de los 18 años en un poco más de cinco millones de personas, por lo que asciende a 13.404.084 potenciales votantes, que también por primera vez, votarán en mesas mixtas, sin separación por sexos en distintos colegios electorales.

«Será importante la foto que proporcionarán (estos comicios) para las elecciones que vienen (presidenciales en 2013), y preparar las estrategias.  Si se detecta más voto de los jóvenes el discurso de los políticos podría cambiar», señaló a la AFP el analista de la Universidad Adolfo Ibáñez, Eugenio Rengifo.

Los resultados de las elecciones de alcaldes y concejales en las principales capitales del país, Santiago, Valparaíso y Concepción, -que en la anterior elección ganó la derecha en las tres ciudades- representarán una buena medición de fuerzas entre ambas coaliciones.

La Alianza de derecha, integrada por el moderado partido Renovación Nacional (RN) y la ultraconservadora Unión Democrática Independiente (UDI), ganó las últimas elecciones municipales de 2008 con 40,49% de los votos, y consiguió 144 alcaldías.

La Concertación, la coalición de centro-izquierda, sufrió entonces su primer descalabro luego de 18 años de victorias tras la llegada de la democracia, y alcanzó 38,43% de votos, con una caída de 6%, aunque obtuvo 147 alcaldías.

Esos resultados antecedieron el cambio de ciclo político que se concretó en las siguientes elecciones presidenciales del 2009, cuando el empresario Sebastián Piñera logró llevar al poder a la derecha luego de 20 años.

La Concertación se presenta este domingo dividida en dos pactos: en las elecciones por concejales la Democracia Cristiana se sumará al Partido Socialista, y por otro lado, el Partido Radical y el Partido por la Democracia se unirán al Partido Comunista, hasta ahora el gran ausente del bloque.

En la cita electoral del domingo, la centroizquierda medirá las fuerzas de los distintos partidos del bloque, que le servirán para negociar las listas parlamentarias de cara a los próximos comicios, mientras que la Alianza experimentará su primera evaluación en las urnas desde que la derecha inició su mandato presidencial.

Los resultados se consideran clave para definir la estrategia de las próximos meses de cara a las elecciones del 17 de noviembre del 2013, y la conformación de las candidaturas presidenciales.

«Después de las municipales se va a configurar un cuadro más claro. A (la ex mandataria) Michelle Bachelet le quedará poco tiempo para decidir si quiere ser candidata presidencial. Cuando se defina, se conformará la candidatura de la derecha, que muy probablemente será Laurence Golborne», afirmó Rengifo.

La ex mandataria socialista Michelle Bachelet (2006-2010), quien actualmente reside en Nueva York donde encabeza ONU-Mujer, ha mantenido un estricto silencio sobre su futuro, aunque ha enviado varias señales de que aceptará competir en las elecciones del próximo año.

En la derecha, el candidato más perfilado es el actual ministro de Obras Públicas, Laurence Golborne, quien catapultó su carrera política cuando era ministro de Minería al frente de la operación de rescate de los 33 mineros, y quien aparece como la mejor opción de la Alianza en los sondeos.