En el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, el Movimiento contra la Tortura Sebastián Acevedo denunció los casos de dieciséis personas en una acción que
se desarrolló el sábado 30 de agosto en la explanada de la Catedral de Santiago, frente a la Plaza de Armas, donde los activistas desplegaron un lienzo y pancartas con los nombres e historias de las víctimas de este flagelo durante los gobiernos de postdictadura en Chile.
En su denuncia, el Movimiento destacó que tal como antes lo hizo la dictadura cívico militar que se impuso en Chile tras el golpe de Estado de 1973 y que traspasó el mando de la nación a gobiernos civiles en 1990, los que consolidaron y profundizaron el modelo neoliberal impuesto, hoy las Fuerzas Armadas y de Orden, así como la gran industria extractivista -forestal, pesquera, salmonera y minera-, están detrás de las desapariciones forzadas ante las cuales el Poder Judicial actúa en forma indolente mientras los medios de comunicación masivos callan.
Reiterando su denuncia de los últimos meses sobre las desapariciones forzadas de Hugo Arispe Carvajal, Ricardo Harex González (ambos en 2001); José Huenante Huenante (2005), Ramón
Pacheco Giacomozzi (2008), José Vergara Espinoza (2015), Geraldo Monarez Peña (2019), y Jean Fedor Louis (2020). En todos estos casos testigos presenciales o investigaciones judiciales han comprobado la participación por acción u omisión de las fuerzas policiales, la de prisiones – Gendarmería-, así como la tardía o deficiente acción del Poder Judicial.
El Movimiento no solo apuntó a los poderes y agentes del Estado. En su denuncia del sábado 30 también señaló a las industrias extractivistas que, en un modelo de explotación salvaje, envenenan la tierra, el aire, los mares y desprecian la vida. En este escenario, se mencionó a los siete pescadores desaparecidos el 30 de marzo de este año cuando el barco pesquero industrial Cobra –de la empresa Blumar SA-, arrolló a la lancha pesquera artesanal Bruma según se ha ido estableciendo en las investigaciones en curso. Producto del impacto, la embarcación menor
prácticamente se pulverizó perdiéndose el rastro de sus ocupantes: el armador y patrón José Luis Medel González y los tripulantes José Fernando Carrasco González, Carlos Hugo Escárate Ramírez, Julio Eduardo Gallardo Díaz, José Luis Medel Sepúlveda, Juan Jorge Muñoz Balladares y Jonathan Daniel Torres Saldaña.
A ellos se suman dos mujeres: la lamngen mapuche Julia Chuñil, cuyo rastro se perdió el 8 de noviembre de 2024 en la Región de los Ríos, al sur del país. Antes de su desaparición forzada, la
defensora del bosque nativo recibió amenazas y hostigamientos por parte de empresarios dedicados a la explotación forestal. El segundo caso corresponde a la concejala María Ignacia
González, desaparecida desde el 15 de junio de este año cuando se dirigía a participar en labores de ayuda a vecinos afectados por los temporales en la Región del Maule. En este caso el reproche al Gobierno es por no haber iniciado acciones judiciales tendientes a esclarecer los hechos ante la desaparición forzada de una representante electa por la ciudadanía para el gobierno local.
Tras su proclama frente a la Plaza de Armas de Santiago, los integrantes del Movimiento contra la Tortura Sebastián Acevedo enfilaron por las céntricas calles de Santiago exhibiendo el lienzo y pancartas, además de repartir librillos con las historias de estas dieciséis víctimas de desaparición forzada, buscando generar en la ciudadanía conciencia de esta oscura realidad que los grandes medios de comunicación callan.
