La Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina advierte que ha “alcanzado un punto de quiebre” debido a la suspensión de la financiación por parte de Estados Unidos y otros países, así como a los repetidos intentos de Israel de desmantelar esta organización, que proporciona ayuda humanitaria vital. En una carta dirigida al presidente de la Asamblea General de la ONU, el director de la agencia, Philippe Lazzarini, expresó: “Me temo que estamos al borde de un desastre monumental”. Lazzarini también señaló que durante la ofensiva israelí contra Gaza “han muerto más niños, más periodistas, más personal médico y más personal de la ONU que en cualquier otro conflicto del mundo”