El Congreso aprueba la ley trans con 188 votos a favor, 150 en contra y siete abstenciones. Una de ellas ha sido la de la diputada del PSOE Carmen Calvo.

El Proyecto de Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI ha salido adelante en la votación en el Congreso. La medida, una de las más controvertidas de la legislatura y una de las más importantes para el Ministerio de Igualdad de Irene Montero, ha contado con el apoyo del PSOE y la abstención de Carmen Calvo. Ha sido aprobada con 188 votos a favor, 150 en contra y siete abstenciones. Una de ellas ha sido la de la diputada del PSOE Carmen Calvo.

La norma reconoce la autodeterminación de género y desarrolla medidas para garantizar los derechos de las personas LGTBI.

Además de la autodeterminación de género a través de un sistema de doble comparecencia, sin tutelas médicas ni judiciales, la nueva norma incorpora la despatologización de las personas trans, que dejan legalmente de ser consideradas enfermas. Nunca se volverá a exigir un diagnóstico médico para acceder al cambio registral del sexo.

La ley también garantiza el derecho de las personas extranjeras a cambiar los documentos expedidos en España si en su país no pueden hacerlo.

Se equiparan las parejas de mujeres a las parejas heterosexuales en cuanto al derecho de filiación de su descendencia. Ya no será necesario el requisito del matrimonio.

Otra de las novedades de la ley es la prohibición de las terapias de conversión. Quedan erradicadas las falsas terapias de conversión, aunque cuenten con el consentimiento de las personas interesadas, al ser consideradas meras torturas, carentes de cualquier base científica.

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