POEMA

 

 

Por Sara Tajuelo

1 de octubre, Día Internacional de las Personas Mayores
Por sus derechos y su dignidad

 

Muestra el baile de las sombras, cuerpos inmóviles
danzando en brazos del conservador encierro.
Retinas que navegan impávidas, náufragos de la memoria
que sin salvavidas se lanzan al ocaso en soledad.

Sobre el cristal en calma se aplasta su rostro y más allá,
tras la bruma, la privación de interacción social.
Se ahoga el quejido que brota de la garganta enjuta,
desprovista de brebaje sucumbe a la escasez de personal.

Enfermedad neurodegenerativa revestida de reclusos
aislados del mundo, ocultos a la mirada social.
Pellejo que sustituye las carnes lozanas, vaciado de esencia,
despojado de intención, estrechez de terapias, tic-tac.

En la bruma de la estancia desdentada una mirada
se abre paso hilvanando lo humano al gastado hollejo.
Ternura que atraviesa el ocaso, apartando las nubes,
y trae la esperanza a su danzarín despertar.

Las sombras recesan el eterno baile,
sobre el sillón descansa la luz de su mirar,
yace la materia, lo oculto se muestra…
Despierta la esperanza en brazos de la inmortalidad.