El miércoles 21 de septiembre de 2022 se inauguró la exposición fotográfica “Contra toda autoridad (menos la de mi mamá)” en el museo de Artes Visuales de la Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano.

Por: Iñaki Chaves

Publicado por: Pateras al Sur

En diciembre de 1977, la revista Diners se preguntaba “¿Quiénes fueron las primeras mujeres en Colombia que se dedicaron a la fotografía?”; en octubre de 2020, Natalia Pedraza se cuestionaba en El Espectador “¿Dónde están las fotógrafas colombianas?”. Hoy podemos decir que Colombia tiene un buen grupo de mujeres fotógrafas que están ahí, en la brecha, produciendo y narrando con fuerza su visión del mundo. Una parte representativa de ellas estuvo en la charla previa a la inauguración de la exposición que recoge algunas de sus fotografías.

Nathalia Angarita, Lina Gasca, Natalia Pedraza y Diana Rey, egresadas del programa de Fotografía de dicha universidad, volvieron a su alma mater para conversar sobre su labor y sus experiencias. En la biblioteca de la Tadeo mantuvieron una amena charla con la periodista Marina Sardiña, dando su particular versión de lo que significa ser fotógrafas en un mundo de hombres -“el ejercicio fotográfico que cada una asume, sorteando las miradas patriarcales de un entorno acostumbrado a que sean hombres quienes realizan el registro visual de la realidad” como reza la presentación de la muestra- y de lo que les ha significado pelear por ser lo que querían ser y que ya son.

A continuación, abrieron la muestra fotográfica “Contra toda autoridad” en la que presentan una parte de los trabajos que han venido realizando en las calles durante los últimos tres años. Es la mirada femenina de cuatro fotodocumentalistas que luchan por abrirse espacio en una profesión mayormente masculina y que demuestran que ellas también pueden, sin tanto ruido, sin tanto alarde y con mucho menos ego, pero con trabajos valiosos y comprometidos, documentar con solvencia la realidad.

Ellas manifiestan su rebeldía a través de las imágenes contra el poder macho y blanco que se han encontrado en su desempeño profesional. No sólo el de las autoridades, sino el de sus propios compañeros de gremio a los que han tenido que enseñar que ellas SÍ SON, son profesionales que saben estar y saben hacer.

 

La muestra fotográfica nos permite observar las calles y sus protestas vistas por los ojos críticos de cuatro jóvenes fotógrafas que reivindican su poder contra los otros poderes, los que tradicionalmente las han excluido. Contra toda autoridad, menos la de sus mamás, que ellas sí han estado presentes para respaldarlas, para animarlas y para hacerles creer que sí podían. Estos trabajos, y los que están por venir, así lo certifican.

Las cuatro nos ofrecen una visión femenina y feminista de la realidad social y de la realidad de las mujeres, siendo “testigos de los acontecimientos que capturan con sus imágenes para narrar no sólo el momento fotografiado, sino, de alguna manera, dar cuenta de su posición ética y política frente a los hechos”, en una actividad en la que, pese a todas las dificultades, no pueden ser neutrales. Porque son seres humanos, porque son mujeres y porque son fotógrafas. Con compromiso y con berraquera. La exposición estará abierta hasta el 14 de octubre. Un paso más en esa lucha en la que les toca seguir caminando. Quienes estén por Bogotá no pierdan la oportunidad de visitar la muestra fotográfica de estas jóvenes documentalistas.

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