En un lugar del planeta es verano, en otro es invierno. En unos lugares del mundo se hacen planes para disfrutar, en otros para sobrevivir.

Mira a tu alrededor. ¿Qué ves? ¿Verano o invierno? ¿Guerra o paz? ¿Motivos para la felicidad o para la tristeza? El lugar donde nos encontramos marca nuestro presente.

¿Qué fue primero, oriente u occidente?  El primer rayo de sol  del día, ¿dónde llega?; ¿quién lo ha decidido así?; ¿dónde nace el sol?

Desde hace unos días me planteo esta pregunta como la de ¿qué fue primero, el huevo o la gallina?

Llamamos a Japón la tierra del Sol Naciente pero ¿por qué creemos que nace el día ahí? ¿Dónde está el reloj galáctico que nos sitúa en un paralelo o meridiano? ¿Por qué creernos arquitectos del universo? ¿Por qué sentirnos el centro del universo?

Viejo mundo, nuevo mundo, poniente, oriente… etiquetas superfluas que designan temporalidad cuando sabemos que el universo no tiene medidas, quizás por eso creemos que es infinito.

Infinito es otro concepto. ¿Cómo se puede medir lo inconcebible, indefinible o indeterminado?

Si nos vamos por las ramas de la filosofía, o la metafísica, nuestros pensamientos pueden entrar en un bucle de infinitas respuestas que se extienden como raíces de la humanidad. Como si la humanidad pudiera tener raíces… poéticamente hablando sí, metafóricamente hablando sí, por supuesto que sí, la poesía es metáfora… las raíces de la humanidad por las cuales brota el árbol del conocimiento, del bien y del mal, de la conciencia.

¿Para qué sirve la filosofía? Se preguntan algunos pensadores, ¿para que sirve pensar? Se preguntan algunos filósofos.

Si lo primero fue la nada y luego el verbo, ¿dónde situamos al pensamiento? ¿Es el Creador un Ser Pensante o un Ser Pensado? ¿Podemos definir al indescriptible, inconcebible, al nunca-visto creador de toda criatura?

¿En qué lugar del mundo te encuentras? ¿Hace frío o calor? ¿Hay paz o guerras? ¿Vives en paz contigo mismo o batallas contra el adversario que habita en ti?

Sintiéndome creador de palabras sustituyo pace por paze, dícese del que vive en paz allá donde esté,  y escribo… Uno es de donde paze y no de donde nace, aunque es verdad que tira la sangre de los ancestros, mi padre era vasco, abuela vasca, abuelo extremeño; mi madre de México, abuelo de Huelva, bisabuelo portugués; abuela de Fuensalida, Toledo. Yo ahora vivo en Madrid pero mi paz la hallo en cualquier parte, cuanto más natural, más paz.

El mestizaje enriquece las culturas y los corazones. Cuando sales de tu zona de confort te das cuenta de que en el resto del planeta existen otras zonas más confortables pero como nos han condicionado con frases tipo “nunca hables con extraños”, tardamos en descubrirlo. Precaución, si hablamos con personas que tienen otras formas de pensamiento podremos descubrir aquello que nos une, lejos de lo que nos separa, seguro que tenemos más cosas en común de las que pensamos.

Atención: conocer otro tipo de pensamientos abre la mente.

Si una persona de una aldea de un país de Oriente Medio, por ejemplo, no conoce lo que es un reloj, ¿sabrá que Japón es la tierra del  Sol Naciente? ¿Sabrá que existe Japón? Quizás para él el sol nace detrás de la montaña sagrada, y detrás del sol viene la oscuridad por la misma sagrada montaña. En ese orden natural de la vida, los ciclos lunares, esa forma natural de contar el tiempo en el planeta tierra, planeta agua, planeta azul. ¡Qué hermosa es la vida en nuestro hábitat!

¿Qué estás viviendo ahora? ¿Verano o invierno? ¿Guerra o paz?

¿Te gusta ver amanecer o anochecer? No respondas. No tienes porque decidir entre dos opciones. Te pueden gustar las dos cosas. Tener que tomar decisiones entre dos opciones es otra forma de manipulación; puede ser que no te guste ninguna de las opciones que conocemos; puede que te guste otra alternativa que no sea muy conocida, o puede que te guste un poco de cada opción.

Gobernar es que un grupo de personas que representan a todo un estado decidan lo que es mejor para todos los ciudadanos. En el parlamento se ha de dialogar para mejorar, para que mejoremos como sociedad. Nada debería ser impuesto ni por la doctrina del miedo, ni coaccionando, ni mintiendo o manipulando. Los valores y la ética por encima de cualquier idea política.

Desconfío de todo aquel que es responsable, directa o indirectamente, del caos del viejo orden mundial y no quiero que lideren, ni se vinculen, al cambio hacia ese nuevo orden mundial que algunos pretenden. No me declino por ninguna de las opciones que hablan de NWO (NOM). El cambio es necesario pero las alternativas que más me gustan se escriben en líneas torcidas a los márgenes de sus ideales.

Mira de nuevo a tu alrededor, ¿Qué ves? ¿Algún motivo para ser feliz? Seguro que sí. La filosofía, leer a los clásicos. Enseñar a pensar, a debatir, a construir y a dudar, pilares básicos para el crecimiento espiritual de cada ser individual que formará un colectivo con derecho a voto.

Enseñar a creer en uno mismo, a conocerse y a observar con respeto otras formas de vida, pilares básicos para la correcta convivencia.

Respeto, respeto a lo diferente. Respeto a toda forma de vida por muy pequeña que parezca… ¿Has visto lo pequeño que es el mundo en relación con el espacio in-finito? Conceptuarnos pequeños ante la inmensidad del universo nos hace poner los pies descalzos sobre la tierra y, con humildad, pensar como cada persona de este mundo, en nuestra unión, hace grande al planeta azul.

¿En otras galaxias también se preguntarán si hay vida inteligente en la Vía Láctea?, ¿dónde nace el sol en el Universo?, ¿también habrá filósofos pensadores con ganas de pensar y hacerse preguntas?

¿Dónde está el universo en relación a la nada si la nada es el principio de todo? Luego fue un verbo, la luz se hizo…   y pensamos… pensemos, cuestionémonos.