Publicación original: Comisión de la Verdad

En una audiencia organizada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la Comisión de la Verdad presentó un balance de su funcionamiento y reiteró las dificultades que ha tenido para recibir información reservada por parte de entidades públicas.

 

Este martes, durante una de las audiencias del periodo de sesiones virtuales que adelanta la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la Comisión de la Verdad, en cabeza de su presidente Francisco de Roux y del comisionado Alejandro Valencia, expuso los principales avances de la entidad en lo corrido de su mandato y reiteró algunas dificultades que han entorpecido el trabajo de investigación sobre lo ocurrido en el conflicto armado colombiano. Para este encuentro se esperaba la participación de representantes del Gobierno Nacional, pero no hubo presencia de delegados del Ejecutivo.

El comisionado Valencia enumeró cinco peticiones puntuales a la CIDH, con las cuales se espera que en el tiempo que resta para la entrega del informe final, alrededor de 11 meses, se pueda acceder a información que no ha sido entregada y agilizar la recepción de algunos documentos, además de reconocer la importancia del esclarecimiento de la verdad y evitar que se altere el funcionamiento del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición (SIVJRNR):

  1. Que la CIDH reconozca la labor e importancia que tiene el trabajo de la Comisión de la Verdad frente a los derechos de las víctimas del conflicto.
  2. Que la CIDH, en su informe anual, en el capítulo relativo al seguimiento a Colombia presente un balance a la situación expuesta durante la audiencia virtual.
  3. Que la CIDH requiera al Estado colombiano para que presente, antes de marzo de 2021, un informe detallado sobre el estado de las peticiones elevadas por la Comisión de la Verdad relacionadas con el acceso a información y, en cualquier caso, presentar la justificación para la negativa de entrega de esta.
  4. Que la CIDH requiera al Estado colombiano para que se garantice la colaboración armónica con los mandatos y funciones de la Comisión de la Verdad, en los términos del Decreto Ley 588 de 2017.
  5. Que la CIDH exhorte al Estado colombiano para que se abstenga de presentar iniciativas legislativas que busquen reformar los órganos del SIVJRNR en contravía de los estándares internacionales y los derechos de las víctimas.

Valencia expuso durante la audiencia que la Comisión de la Verdad ha sufrido estigmatización y sus miembros han sido señalados, lo cual pone en riesgo la actividad de las y los comisionados y de todo el equipo de trabajo de la entidad. Recordó que mediante un acto legislativo se pretendió limitar el acceso a la información a los órganos del SIVJRNR (Comisión de la Verdad, Jurisdicción Especial para la Paz y Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas) y, aunque no prosperó, han continuado los intentos para modificar el sistema tal cual está constituido.

El silencio de algunas entidades, la falta de respuesta a las solicitudes, las negativas, la omisión de información, la falta de congruencia de los documentos entregados e incluso la destrucción de archivos, fueron algunos de los obstáculos mencionados por Valencia, que ya se había referido a este tema durante la última rendición de cuentas de la Comisión de la Verdad.

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“Hemos tenido mayores dificultades con las Fuerzas Militares, y se genera mayor resistencia cuando indagamos sobre hechos puntuales, sensibles, sobre los cuales hay denuncias que implican a la fuerza pública, como son algunos casos de masacres. No sucede lo mismo cuando la información solicitada es más genérica”, dijo Valencia.

Por otro lado, el comisionado reveló que la creación del comité de seguimiento a las recomendaciones que deje la Comisión será definido por el pleno de 11 comisionados y comisionadas, y según las características del Informe Final se configurará este mecanismo. No obstante, señaló, la idea es empezar a trabajar en este durante el primer semestre de 2021 y, dependiendo del presupuesto, ver la posibilidad de que pueda funcionar incluso antes de noviembre del año entrante.

Sobre este tema, Francisco de Roux manifestó que ya existe un trabajo previo y se ha consolidado una red con más de 900 aliados. Agregó que además del comité se dejará un archivo transmedia que podrá ser consultado por cualquier persona desde diferentes lugares del mundo.

Respaldo al trabajo de la Comisión

Andrea Urrejola, comisionada de la CIDH, dijo que este organismo internacional conoce la situación con respecto a las barreras para acceder a la información y ya se ha manifestado preocupación sobre el asunto al Gobierno Nacional. También aprovechó la audiencia para resaltar el trabajo de la Comisión de la Verdad. “Es impactante lo que han hecho en materia de memoria y reconocimiento a las víctimas. Le han dado oportunidad a los silencios que se quieren hacer oír”, expresó.

El trabajo que ha adelantado la Comisión con los pueblos étnicos fue valorado positivamente por Flávia Piovesan, comisionada de la CIDH, pero también mencionó su preocupación por las dificultades que enfrenta la entidad: “Para garantizar el derecho a la verdad es necesario el acceso a la información. ¿Cómo es posible rechazar las solicitudes cuando existen leyes de transparencia?”.

Pedro Vaca, relator especial para la Libertad de Expresión de la CIDH, lamentó las barreras a las que se han enfrentado la Comisión de la Verdad y subrayó que esto podría condenar, al menos a una generación más, a padecer la violencia del conflicto armado por esos obstáculos que se ponen al esclarecimiento de lo ocurrido.

Esmeralda Arosemena, comisionada de la CIDH, se refirió a la violencia que están sufriendo los líderes sociales y defensores de derechos humanos. Dijo que es frustrante que sigan ocurriendo asesinatos contra estas personas, sobre todo por las expectativas que se tenían tras la firma del acuerdo de paz en La Habana.

“Lamento profundamente la ausencia del Estado en esta audiencia, porque estos espacios son para escuchar posiciones y queríamos hacer preguntas puntuales frente al trabajo de la Comisión de la Verdad, y por cuestiones del tiempo que le queda es una tarea urgente”, anotó Arosemena.

La ausencia de representantes del Gobierno colombiano también fue mencionada por Julissa Mantilla, comisionada de la CIDH, quien aseveró que es como dar la espalda a las víctimas.

Reflexiones necesarias

“La ausencia del Gobierno colombiano en esta reunión, para mí, es poner en evidencia la verdad política que nosotros estamos viviendo en el país”, dijo Francisco de Roux, recordando que la Comisión es sensible a conocer las diversas posiciones porque la entidad asume su mandato de la manera más seria posible.

Reiteró que las críticas son bien recibidas, pero hay que diferenciarlas de los señalamientos y las calificaciones políticas sin fundamento, pues la Comisión de la Verdad no hace parte de ningún partido político, ni trabaja en contra de ninguna persona en concreto, sino que busca derribar los miedos, las mentiras y el negacionismo.

“Colombia necesitaba un liderazgo muy grande luego del acuerdo de La Habana, uno que fuera capaz de convocar a todos los sectores, pero no lo tuvimos y por eso, aunque avanzamos, lo hacemos en medio de restricciones generadas por el espacio de lo público y lo político”, dijo.

De Roux concluyó manifestando que, si bien el miedo puede limitar el acercamiento a la verdad, haber pasado por una guerra tan compleja como la que ha vivido Colombia prepara mejor a la sociedad para asumir riesgos y avanzar: “Debo decir que me sorprende percibir una creciente determinación de los colombianos para salir a decir la verdad”.

Ver la audiencia completa:

Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición de Colombia: balance y desafíos