Por Jhon Sánchez

En 2010, a una cuadra de la línea L del metro en Brooklyn, encontré mi lugar favorito de falafel. El dueño era un palestino, apodado Yuyo; lo que más recuerdo de él fueron sus manos. Eran tan grandes que uno de ellos cubriría un pan de pita entero. Un día, mientras comía mi sándwich, Yuyo se paró a un lado y habló con un hombre jasídico. Asintiendo, el hombre escribió algo en su teléfono celular mientras Yuyo hablaba. Cuando  se fue, Yuyo me preguntó: «¿Sabes quién es este hombre?»

Limpié la salsa blanca de la comisura de mi boca sin saber qué decir. Yuyo enarcó las cejas, formando tres líneas largas en la frente y dijo: «Él es mi socio en este negocio». Sonrió con orgullo.

No sé cómo lograr la paz; sin embargo, la creación de mecanismos de ayuda mutua entre grupos en conflicto es la mejor forma de sentar las bases para el diálogo. Así fue la experiencia de Irlanda del Norte. «En 1986, Gran Bretaña y la República de Irlanda establecieron el Fondo Internacional para Irlanda (IFI), cuyos objetivos eran promover el avance económico y social y fomentar el diálogo entre nacionalistas y sindicalistas en Irlanda del Norte y la República de Irlanda». En un par de años, los resultados fueron asombrosos, un aumento significativo en la industria del turismo, la tasa de desempleo más baja en catorce años y lo que es más importante, el sector privado abogando por la paz y adoptando principios de no discriminación.

Hoy, intentamos replicar el modelo a través de la Ley de Asociación de Paz para promover la unión económica y el diálogo entre palestinos e israelíes. Un esfuerzo bipartidista presentó el proyecto de ley S1727 al Senado. Este ha sido el resultado del trabajo de la Alianza para la Paz en Oriente Medio (ALLMEP), una alianza de más de un centenar de organizaciones que tienen opiniones diversas sobre el conflicto israelo-palestino. Kevin Rachlin, el director estadounidense de ALLMEP, nos insta a que nos comuniquemos con nuestros senadores para votar a favor del proyecto de ley.

Los 250 millones también beneficiarían a organizaciones como Proyecto Rozana y Semillas de Paz, entre otras. El Proyecto Rozana brinda acceso a los palestinos al sistema de salud israelí. Y Seeds of Peace tiene un campamento de verano de liderazgo para adolescentes palestinos e israelíes con la finalidad de crear un diálogo entre ellos.


Traducción del inglés por Maria Paula Alvarez