Por Jorge Nuñez Arzuaga*

La situación de  aislamiento social  provocada por la pandemia exige al Estado aplicar políticas públicas que mitiguen, o amortigüen,  los efectos de la retracción en las actividades económicas. Las industrias culturales, y los artistas en particular, ven comprometida su continuidad y subsistencia.

 

El gobierno de Argentina a través del Ministerio de Cultura de la Nación, la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) y la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), implementó en los últimos meses una serie de medidas tendientes a paliar la emergencia sanitaria asignando recursos y beneficios.  En este sentido, las autoridades del Ministerio afirman “El sector cultural es uno de los más golpeados… La cultura de la solidaridad, elemento guía de las decisiones de esta cartera, apunta a un objetivo irrenunciable: la vida y la salud de todos los argentinos y argentinas”.

El Ministerio de Cultura puso a disposición de las autoridades sanitarias de la Provincia de Buenos Aires, la Nación y la Cruz Roja Argentina, las instalaciones de la totalidad del parque Tecnópolis, para establecer allí una unidad sanitaria destinada a personas con síntomas leves que requieren internación, con la capacidad de albergar a 2000 pacientes, contribuyendo a que el sistema hospitalario no colapse. Y junto al Ministerio de Educación se estableció en el Museo Malvinas e Islas del Atlántico Sur un importante conjunto de impresoras 3D para la fabricación de máscaras protectoras destinadas al personal de salud y de las fuerzas de seguridad.

El Teatro Nacional Cervantes conformó equipos rotativos de trabajadoras y trabajadores de sastrería y vestuario para la confección de tapabocas en sus talleres, con telas que fueron donadas por una empresa textil e insumos aportados por el Ministerio de Desarrollo Social. Además, abrió el concurso de obras cortas inéditas “Nuestro Teatro”, con un presupuesto de 20 millones de pesos para reactivar la producción teatral.

La línea de Crédito a Tasa Cero para las industrias culturales alcanza a monotributistas y autónomos con créditos de hasta 150.000 pesos, por un período de gracia de doce meses a partir de la primera acreditación, luego del cual se reembolsará en un mínimo de doce cuotas mensuales iguales y consecutivas.

El Programa Puntos de Cultura acompaña proyectos de organizaciones comunitarias de todo el país, brindando un apoyo económico que busca fortalecer el trabajo territorial y las redes locales, regionales y nacionales que sostienen el entramado social. La convocatoria, dirigida a asociaciones civiles, fundaciones, cooperativas, mutuales, organizaciones de base territorial sin personería jurídica y redes de organizaciones vinculadas a la cultura comunitaria, llega a más de 700 agrupaciones y prevé un presupuesto de 100 millones de pesos.

Por otro lado, el Fondo Desarrollar consiste en una ayuda para el sostenimiento operativo de espacios culturales multifuncionales que desarrollan producción, formación, investigación y promoción de las artes y la cultura: centros culturales, peñas, milongas, clubes de música, espacios de arte, circo, danza y teatro; espacios en los que se realicen cursos, talleres, clases, seminarios; lugares en los que se realicen presentaciones de artes performáticas, exposiciones de artes visuales y audiovisuales y actividades de carácter comunitario y solidario. Los beneficiarios reciben un monto de entre 100.000 y 200.000 pesos.

Tanto el Fondo Nacional de las Artes con sus becas y subsidios, como el Instituto Nacional de la Música con la Convocatoria de Fomento Solidario, hacen un valioso complemento en esta hora que urge respuestas a las demandas de la comunidad  artística.

Otras  áreas de la órbita gubernamental canalizan partidas presupuestarias orientadas a diferentes colectivos: la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares, el Consejo Federal de la Cultura, el Instituto Nacional del Teatro, el Centro Cultural Kirchner, el Instituto Nacional de Cine y Artes Visuales (INCAA).

“Los más vulnerables son los trabajadores independientes”

El Sistema de Información Cultural de la Argentina realizó un relevamiento de alcance federal con el fin de generar información sobre los diversos sectores de la cultura en Argentina: sus problemáticas principales y necesidades en general. Se publicó un Informe que analiza el primer corte, en el que se obtuvieron 15.260 respuestas (13.019 personas y 2.241 organizaciones vinculadas al campo de la cultura).

“Los primeros resultados de la Encuesta Nacional de Cultura, realizada por el SInCA, confirman que los agentes culturales más vulnerables en la emergencia sanitaria son aquellos que trabajan de manera independiente, sin ingresos estables, y cuya actividad en el ámbito cultural representa más de la mitad de sus ingresos mensuales…”

ANSES y AFIP generaron una batería de propuestas: créditos a tasa cero para personas adheridas al Régimen Simplificado para Pequeños Contribuyentes y para trabajadoras y trabajadores autónomos; Ingreso Familiar de Emergencia; Prórroga de contratos y congelamiento de precios de alquileres; suspensión del cierre de cuentas bancarias; Tarjeta Alimentar;  Programa de asistencia de emergencia al trabajo y la producción para empleadores y trabajadores (ATP), afectados por la emergencia sanitaria;  Sistema Integral de Prestaciones por Desempleo;  abstención de corte de servicios en caso de mora o falta de pago en energía eléctrica, gas por redes y agua corriente, telefonía fija o móvil e Internet y TV por cable.

Sin embargo, las expectativas todavía no están satisfechas, y en muchos casos son los propios agentes culturales los que se conectan espontánea y horizontalmente para ayudarse y asistir a quienes enfrentan circunstancias extremas. Los valores de  solidaridad y reciprocidad, arraigados en lo mejor de las culturas de nuestro pueblo, afloran en estos momentos y se expresan, también, en festivales artísticos –virtuales, autogestionados- que recogen donaciones y voluntades para superar la crisis actual.


* Poeta y periodista. Miembro del Centro de Estudios Humanistas Moebius, Mar del Plata (Argentina).