El presidente boliviano Evo Morales convocó para la mañana de hoy una conferencia de prensa en el Hotel Bauen de la Ciudad de Buenos Aires para informar a la prensa, que los doctores Gustavo Ferreyra y Raúl Zaffaroni comenzaron a formar parte de su equipo asesor y de defensa, en caso de ser necesario. De este modo, se suman al trabajo que había comenzado a realizar el español Baltazar Garzón.

Pasadas las 11 de la mañana hizo la presentación de sus abogados el dirigente Evo Morales, quien realizó un breve contexto de las violaciones a los derechos humanos que se están cometiendo en Bolivia y de los casos más recientes de detenciones por acusación de actos sediciosos, que los medios oficialistas califican de “terroristas”. Mismo apelativo que recibieron las personas asesinadas y heridas durante la realización del golpe de estado.

Morales también indicó que la persecución es brutal y que incluye a los medios de comunicación, muchos de los cuales continúan sufriendo amenazas y ataques. Prensa extranjera fue echada del país, también bajo la acusación de “sediciosos”.

El presidente agradeció a los abogados por sumarse a este trabajo de defender la verdad y la justicia y defendió el trabajo realizado durante su gobierno, “nuestro proceso de cambio siempre defendió a los humildes”.

El abogado constitucionalista Gustavo Ferreyra puntualizó, primero que nada, que “Bolivia no es un estado constitucional” y explicó que en el país “no existe la fuerza regulada, es pura fuerza bruta”, en referencia a cómo se maneja la autoproclamada presidenta Jeanine Añez y las fuerzas de seguridad.

“Ignoramos si el gobierno de facto domina el Estado” y agregó que al no haberse pronunciado la Asamblea sobre la renuncia de Evo Morales, “ni aceptando, ni rechazándola”, el país está direccionado a caer en la acefalía.

A su vez, fue muy vehemente al explicar que “la Argentina no debería responder a ningún requerimiento del actual gobierno boliviano golpista”. Y especificó que “la Argentina es un país de paz y tiene el impedimento constitucional de mantener relaciones con países en estado de guerra, como es el caso de Bolivia” y aprovechó la conferencia para informar a las autoridades pertinentes de que esto es así y no hay otra manera de entenderlo.

Para el ex juez de la Corte Suprema argentina y miembro de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Raúl Zaffaroni “hasta el 22 de enero, Evo es el presidente constitucional de Bolivia” y “no es un refugiado en la Argentina, Evo tiene la inmunidad que le corresponde a todo presidente extranjero en nuestro territorio”.

“Peor que los muertos, heridos y desapariciones es que Bolivia se salió del sistema planetario”, expresaba Zaffaroni. “El régimen boliviano, o el ejercicio de poder, es difícil ponerles un nombre, vulneraron todos los derechos, hostigando embajadas, echando diplomáticos. Tocaron todas las normas más elementales de convivencia de la comunidad internacional”.

“Baltazar Garzón nos confirmó que no hubo gestiones bolivianas ante Interpol”, como tampoco la acción de ningún juez. “La sedición es un delito político y no cabe de ninguna manera la extradición. Algo que solo sostienen dos fiscales en toda Bolivia”, continuaba el letrado.

Sobre el futuro de la situación en el país, Zaffaroni explicó que “a partir de las 0 hs del 23 de enero no hay más mandatos constitucionales y se debe revertir el daño”. Aseguró que tanto su labor, como la de Ferreyra son las de encontrar un modo de solucionar la situación “sin antecedentes” que ocurre en el Estado Plurinacional. “El 23 de enero podría asumir el presidente del Tribunal Supremo, esto normalizaría la situación, es algo que ya ocurrió en Bolivia y está contemplado constitucionalmente”, explicó en referencia que la Justicia es una de las pocas instituciones que se ha mantenido estable en estos meses en Bolivia.

“No importa la calificación que haga Añez de nada, ni lo que digan los medios internacionales. Lo que importa es recomponer el estado de derecho y evitar el daño en Bolivia” expresó contundentemente el ex juez argentino y confirmó que “no buscamos venganza, sino restituir derechos”.

Morales que pasó la fiesta de fin de año reunido con representantes de la colectividad boliviana, también se reunió con sobrevivientes y familiares de las víctimas de la masacre de Senkata y mantiene una apretada agenda en la Ciudad de Buenos Aires, buscando recomponer las filas del MAS de cara a las próximas elecciones, que todavía no tienen fecha y de la que no han podido excluir al partido del mandatario como pretendían sus opositores.

Fotos Gentileza de Rolando Andrade Stracuzzi Ley 11723