Transcribimos aquí el homenaje que este 11 de septiembre efectuara desde la Cámara el Diputado Humanista:

«Este 11 de septiembre se cumplen 46 años del golpe de Estado cívico-militar que derrocó al gobierno constitucional de Salvador Allende. Golpe que dio origen a la más larga y cruel dictadura de nuestra historia nacional.

En esta fecha, muchos de nosotros no podemos sustraernos del recuerdo y del homenaje a las víctimas de la represión y a sus familias, quienes hasta el día de hoy luchan por porque exista verdad y justicia. Homenaje a quienes llevan décadas esperando saber dónde están sus hijos, sus padres, sus parejas.

Son ellas y ellos la mayor expresión de la dignidad del pueblo chileno, de las miles de personas que no olvidan, pese a los intentos de borrar la memoria, de ocultar o de suprimir la historia desde la negación, desde el silencio o desde las políticas educativas.

Este 11 de septiembre, una vez más miles de personas en todo el país nos demuestran que la memoria es persistente, que empuja y da fuerzas a quienes buscan justicia. La memoria nos exige recordar para entender lo que somos y para definir lo que queremos y lo que podemos ser.

Junto al amargo recuerdo del bombardeo a La Moneda, volverán sobre muchos de nosotros las imágenes y las voces de los que ya no están. El último discurso del Presidente Allende, el cobarde ataque a la casa en calle Tomás Moro, la persecusión a los militares constitucionalistas en la Academia de Guerra, las torturas y los asesinatos en la Villa Grimaldi o en el Cuartel Simón Bolivar, los vuelos de la muerte en el aeródromo Tobalaba, o la erradicación de los pobladores en los camiones de la basura en la Villa San Luis de Las Condes.

Pero al volver a conectarnos con ese dolor, nos reunimos también con quienes siguen presentes en nuestra memoria. Con aquellos que nos recuerdan que antes del golpe de Estado existió un Chile con un pasado mejor y que nos inspiran a construir el futuro.

La voz tranquila del Presidente Allende, sigue presente en la conciencia del pueblo chileno. Los que ya no están, inspiran a las nuevas generaciones a crear una sociedad más justa y más solidaria.

Y con ellos, desde la esperanza y desde el recuerdo, lograremos una vez más derrotar a la cultura del miedo, de la muerte y de la violencia.

En nombre de tantas y tantos, en nombre de los humanistas, y yo quisiera decir en nombre de esta Sala pero que está – aunque en las cámaras no aparece – vacía, y tan necesario es un homenaje de toda esta Cámara de Diputados llena, a quienes sufrieron tantas violaciones a los derechos humanos, a los miles y miles de detenidos desaparecidos, exiliados, torturados, a todos ellos en este 11 de septiembre, nuestro homenaje, nuestro recuerdo, por siempre.»