La página de Facebook y el perfil en Twitter de Open Arms muestran la evolución cada vez más dramática de la situación a bordo. «Ya no podemos contener la desesperación.  Ya no podemos explicarlo. Faltan las palabras. Son unos cobardes», acusó la ONG, después de que varios migrantes se hubieran lanzado al agua en un intento de nadar hasta Lampedusa, para ser recuperados por los miembros de la tripulación.

El  primer ministro español, Sánchez, ofreció la disponibilidad del puerto de Algeciras, en el sur del país, pero Open Arms se negó: «¿Después de 26 días de misión, 17 en espera con 134 personas a bordo, una orden del tribunal a favor y 6 países dispuestos a dar acogida, quieren que naveguemos 950 millas, casi  5 días más, hasta Algeciras, el puerto más lejano del Mediterráneo, con una situación insostenible a bordo?», escribió en twitter su fundador, Oscar Camps.

Concepto expresado por Laura Lanuza, directora de comunicación de la ONG – «No aceptamos a España como puerto. No podemos poner en peligro la seguridad de todas estas personas, deben ser desembarcadas inmediatamente» – y desde Mediterranean Hope, el programa para refugiados de la Federación de Iglesias Evangélicas Italianas, según el cual «los Open Arms, sus náufragos y la tripulación no pueden soportar otros 5 días o más en el mar para llegar al puerto de Algeciras». La Federación también se ofreció a ayudar a los migrantes que aún se encontraban a bordo del buque.

La posición de Open Arms se resume en un nuevo mensaje que aparece en Facebook y Twitter: «Enviamos una petición urgente para poder entrar en el puerto de Lampedusa y desembarcar a las 107 personas a bordo durante 17 días. Su estado psicofísico es crítico, su seguridad está en riesgo. Si ocurre lo peor, Europa y Salvini serán los responsables».

Ayer por la tarde, mientras tanto, 57 personas, aparentemente de origen tunecino, llegaron a Lampedusa con un barco, demostrando así que los puertos están cerrados solo para los barcos de las ONG, como, además, reiteró en varias ocasiones el alcalde Martello; rescatados por la Guardia di Finanza cerca del islote de Lampione, los migrantes fueron luego transbordados a tierra. Entre ellos había dos mujeres, una de las cuales estaba embarazada y un niño enfermo, que fue llevado a una clínica. Todos los demás fueron transferidos al punto de acceso de la isla.


Traducción: Ana Gabriela Velásquez Proaño