El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, anuncia la suspensión de todos los acuerdos con el régimen de Israel. “Anunciamos la decisión de la dirección (palestina) de dejar de aplicar los acuerdos firmados con Israel”, ha declarado el jueves 25 de julioel mandatario palestino, según informa la agencia local Wafa.

Abás ha hecho estas declaraciones después de celebrar una reunión de carácter urgente en la ciudad de Ramalá, norte de la ocupada Cisjordania, para abordar las recientes demoliciones del régimen de Tel Aviv en la zona sur de la ciudad de Al-Quds, hechos que han provocado el desplazamiento de decenas de civiles palestinos.

“Nuestras manos han estado y aún se extienden hacia una paz justa, integral y duradera. Pero esto no significa que aceptemos el statu quo o nos rindamos a las medidas de la ocupación. No nos rendiremos, ni aceptaremos el ‘acuerdo del siglo’. Palestina y Jerusalén (Al-Quds) no están a la venta ni a negociación”, ha afirmado Abás.

Además, ha hecho hincapié en que “no habrá paz, seguridad ni estabilidad en nuestra región y en el mundo sin que nuestra gente logre sus derechos en su totalidad. No importa cuánto tiempo lleve, la repugnante ocupación será derrotada y estableceremos nuestro Estado independiente”, ha remarcado.

Si bien, el presidente palestino ha expresado gratitud a todos los “países amigos” por defender al pueblo palestino y su causa justa en los foros internacionales, ha pedido “pasos prácticos y la implementación de las resoluciones de las Naciones Unidas sobre el terreno”.

Israel y los palestinos están sujetos a acuerdos bilaterales en áreas que van desde la gestión del agua hasta la seguridad. Si los palestinos dejan de aplicarlos, esto podría tener consecuencias, en particular, sobre la seguridad en Cisjordania, un territorio palestino ocupado por Israel desde 1967.

La decisión del régimen de Israel de aumentar las construcciones en la ocupada Cisjordania y las partes ocupadas del este de la ciudad de Al-Quds ha puesto en peligro el proceso de paz, estancado desde hace más de cinco años por las violaciones cometidas por el régimen israelí.

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