Durante el encuentro nacional de Pressenza en el Monasterio del Bien Común de Sezano, cerca de Verona, Riccardo Gatti de Open Arms se conectó desde Barcelona en una videoconferencia, en la que nos relató la situación actual de las operaciones de rescate en el Mediterráneo y contestó a las preguntas de los participantes. He aquí un resumen de su intervención.

En este momento hay un silencio informativo sobre lo que está ocurriendo en el Mediterráneo y no hay espacio para dar testimonio. Casi no hay barcos de ONG y no hay autorizaciones de los gobiernos italiano y maltés para llevar a cabo las operaciones de rescate con el desembarque en un puerto seguro. El gobierno español mantiene nuestro barco bloqueado y Sea Watch también está siendo presionado por el gobierno holandés para que detenga sus actividades de búsqueda y rescate. Las autoridades gubernamentales intentan retrasar y/o impedir el trabajo de los barcos, por lo que el rescate en alta mar se hace cada vez más difícil.

Creo que su intención es asegurarse de que no hablemos acerca de la situación, crear un silencio absoluto, hacer caso omiso de lo que ocurre en el mar. También se está intentando ocultar cualquier noticia sobre lo que está ocurriendo en Libia, que a menudo es el punto de partida para las personas que intentan llegar a los puertos europeos.

Desde hace aproximadamente un año, los sistemas de vigilancia de los rescates informan que cada vez se utilizan menos embarcaciones en el Mediterráneo. Creo que se trata de un intento de eclipsar a las estaciones de control.

¿Qué opinas de la parte legal y jurídica de tu trabajo?

Uno de nuestros principales propósitos es difundir por los medios de comunicación nuestro trabajo. Colaboramos con varias ONG para conseguir nuevas vías que nos permitan seguir en marcha. Sin embargo, en el plano de las normativas, la niebla se hace cada vez más densa, en el plano legal/jurídico hay una laguna, existen muchos obstáculos que impiden nuestra labor. Se trata, en cierto modo, de un entorno extra-regulador, por lo que también hay que buscar soluciones en este sentido. Hay que emprender acciones legales, por ejemplo, contra los Gobiernos italiano o español por su abuso de poder en las operaciones de rescate.

Parece que el gobierno español está transfiriendo las operaciones de rescate a Marruecos. ¿Sabes algo al respecto?

Mantenemos contacto con algunas entidades que confirman este escenario, es decir, la intervención de marroquíes, con frecuentes casos de malos tratos, un poco como ocurre con los libios. Parece que las fuerzas marroquíes que trabajan en nombre del Gobierno español no están actuando adecuadamente.

¿Sabes algo de la situación en la costa tunecina? En Italia se habla mucho de Libia, pero no de lo que ocurre en Túnez.

En efecto, tenemos contacto también con algunas asociaciones tunecinas y, por lo que sabemos, la situación no es comparable a la de Libia. Sin embargo, a nivel internacional, confirmo que hay escasa claridad en este caso.

¿Podemos también abordar las causas de esta inmigración forzada y destacar el papel de Europa en este juego? Sensibilizar a la a la gente de los puertos, por ejemplo….

También fomentamos la sensibilización en África, por ejemplo, en Senegal, sobre las características del viaje y las dificultades que pueden encontrar al venir a Europa. No tenemos grandes recursos económicos y somos una treintena, pero este es un trabajo importante y también muy importante. Intentamos informar a la gente de la zona sobre lo que les espera en un posible viaje.

¿Piensan que pueden producirse actos de desobediencia civil con el fin de llamar la atención sobre el hecho de que no estamos hablando de lo que ocurre en el Mediterráneo?

Siempre nos hemos movido dentro del marco de la legislación existente, pero a menudo es violada por los gobiernos. Preferimos mantener un marco legal porque nuestra fuerza es seguir siendo legales, de lo contrario corremos el riesgo de perder nuestra credibilidad.

Los gobiernos han obstaculizado su labor, para que se pueda plantear la idea de que no hay más muertes. ¿Es eso cierto? ¿Tienen ustedes alguna prueba para demostrar que no es así?

Sabemos que los barcos siguen navegando desde la costa africana. Al no poder estar presentes en el mar como antes, también tenemos poca información sobre lo que está sucediendo, pero puedo decir que los viajes no han cesado.

¿Mantienen contacto con las autoridades municipales y con las ciudades que los apoyan?

Sí, estamos siempre en contacto con las ciudades en solidaridad con nuestro trabajo de rescate y seguimos esforzándonos para que la alianza de ciudades firmada en Roma en febrero siga creciendo y para hallar en ella nuevas dinámicas que conduzcan a la defensa de los derechos de los migrantes, su protección y la lucha contra la criminalización de las organizaciones no gubernamentales (ONG) y el colectivo de migrantes.


Traducción del italiano por Nicole Salas