Un centenar de jóvenes se congregaron frente a la Asamblea Nacional este sábado 12 de abril en París en la novena semana de la huelga climática, recordando que el 15 de marzo de 2019 había 40.000 de ellos en París y, sin embargo, de igual forma la Asamblea Nacional votó a favor de posponer el cese del uso del glifosato para el año 2022.

Al constatar que su movimiento no fue tomado en serio, que no se había tomado ninguna acción en la dirección de la ecología, alegaron: «entonces venimos a hacer una fiesta delante de su casa para mostrarles que nosotros tampoco los tomamos en serio. ¿Qué están esperando? No lo decimos lo suficientemente alto, ¡es eso! Entonces hagamos sonar la música muy fuerte frente a la Asamblea Nacional.”

«Este encuentro también supone una oportunidad para conocerse, para reunir a gente que no está acostumbrada a venir a las marchas por el cambio climático o a las reuniones de jóvenes en huelga a causa del clima, y la música es un fenómeno artístico que nos permite reunirnos sobre la base de valores comunes, como la fraternidad, la amistad…»

Esta semana se celebrarán dos eventos importantes. El lunes 15 se desarrollará una asamblea general en la EHESS para establecer una convergencia entre los cuadros rojos que protestan contra el aumento de las tasas de matrícula para los estudiantes extranjeros, otros movimientos sociales que luchan en la actualidad y los ecologistas, con el fin de encontrar una estrategia común. Pero también para establecer un equilibrio de poder necesario con el gobierno del que ya no esperan mucho.

«Construir juntos una sociedad más justa, más igualitaria, más verde, más social y más feliz.”

El segundo evento es una «gran acción de desobediencia civil no violenta» que se llevará a cabo el 19 de abril, para la convocatoria de catorce ONG de protección del clima, entre ellas Greenpeace, titulada «Juntos, bloqueemos la República de Contaminadores».


Traducción del francés por Rosalía Briones