Este breve comentario tiene como objetivo exponer un punto de vista sobre la crisis actual en Venezuela y señalar los probables errores de evaluación que los pueblos a veces distraídos repiten, como si la historia no enseñara nada.

El eje principal del análisis puede ser el proceso de concentración de poder en manos de una minoría que ha estado funcionando durante algún tiempo en la sociedad humana y que hoy alcanza niveles nunca antes vistos.

Durante algún tiempo hemos estado observando una lucha para aprovechar los recursos naturales, las fuentes de energía y las áreas estratégicas para satisfacer los intereses de los grupos de poder, las élites de uno o varios países a expensas de otros.

En este sentido, se han utilizado diversos instrumentos coercitivos en la historia, incluidas guerras coloniales, invasiones, genocidios, esclavitud, ocupaciones, golpes de estado, ataques, desestabilización, embargos, sanciones, etc.

Pero el progreso de las sociedades hace que hoy sea más difícil utilizar abiertamente herramientas coercitivas, ya que las personas las rechazan. Entonces los poderes encuentran conveniente convencer a la opinión pública de que es correcto intervenir en un país determinado, poner fin a un sistema que generalmente se presenta como «autoritario» y reemplazarlo por otro dicho «democrático». Los medios de comunicación en manos de los mismos poderes juegan un papel central en estos casos.

Para no ir demasiado lejos en los siglos, tomemos algunos ejemplos más o menos recientes.

YUGOSLAVIA

Después de la crisis de 1989, Yugoslavia era en Europa un país inclinado a Rusia y no alineado con Occidente. Este enfoque no coincidió con los planes de las potencias occidentales. Entonces en pocos años, se fomentaron conflictos externos, basándose en las diferencias étnicas y religiosas. El Occidente entonces culpó a Serbia, demonizando a su presidente, Slobodan Milosevič, definido por los medios como «el carnicero de los Balcanes». Murió en 2006 bajo la supervisión de la Corte Penal Internacional y en marzo de 2016 el mismo tribunal lo absolvió de la acusación (1). Mientras tanto, Occidente ha logrado instalar una de las bases de la OTAN más grandes del mundo en Kosovo (2).

AFGANISTÁN

Las fuerzas occidentales invadieron Afganistán en octubre de 2001 tras los ataques del 11 de septiembre, como parte de la «guerra contra el terrorismo» con el objetivo de «destruir a Al-Qaeda y capturar o matar a Osama bin Laden». Pero a partir de lo que el general de EE.UU. Wesley Clark admitió, se dio a conocer un plan de control de siete países del Medio Oriente en cinco años, entre los que se encuentra Afganistán (3). La misma Hillary Clinton ha admitido que su país, para controlar esta área estratégica cerca de China, Rusia e Irán, ha organizado y financiado deliberadamente a grupos locales que luego se convirtieron en Al-Qaeda (4). El conflicto continúa hasta hoy.

IRAK

En marzo de 2003, la coalición occidental invadió Irak con el objetivo de deportar a Saddam Hussein debido a su «posesión de armas de destrucción masiva» que luego fue desmentida. Muchos recuerdan al Secretario de Estado de los Estados Unidos, Colin Powell, exponiendo su fatídico discurso (falso) al Consejo de Seguridad de la ONU (5). Mientras que un millón de seres humanos murieron en base a esta mentira, para las compañías petroleras, fabricantes de armas y empresas de reconstrucción occidentales, este conflicto representaba un excelente negocio.

LIBIA

Libia, en las últimas décadas, se veía como un país con un índice creciente de desarrollo humano, infraestructura y distribución de la riqueza con derechos económicos de los ciudadanos como vivienda, salud, educación, ingresos, etc.

Entre los proyectos de Libia se incluía la creación de una moneda panafricana que liberara a África de la dominación del franco CFA y de las instituciones financieras occidentales (6).

Además, Libia ha fundado, junto con Venezuela, el innovador Foro de Cooperación Sudamérica – África llamado ASA, compuesto por 67 países participantes (7). Este eje del Sur, por un lado, era indigesto para la casta neocolonial del norte y, por otro lado, abrió nuevos horizontes de independencia a los continentes del sur ricos en recursos.

Quizás para evitar el contagio de estos proyectos de desarrollo sin precedentes, Occidente desestabilizó a Libia a tiempo, sembrando cizaña entre las tribus de Tripolitania y Cirenaica, apoyando el asesinato del presidente, arrojando al país entero al caos, pero continuando haciendo negocios con el petróleo libio.

VENEZUELA

Venezuela es el país con la mayor reserva de petróleo certificada del mundo, con enormes reservas de oro, gas natural y otras riquezas. Dejo la reflexión al lector para interpretar las razones principales del impaciente intervencionismo occidental. Al mismo tiempo, espero que la disputa en Venezuela se resuelva pacíficamente.

(1) El Tribunal de La Haya despide a Milosevic, https://www.youtube.com/watch?v=6myryvlbuiY

(2) La base del campo Bondsteel, https://fr.wikipedia.org/wiki/Camp_Bondsteel

(3) General Wesley Clark: las guerras han sido planificadas, https://www.youtube.com/watch?v=bkvafb0oq14

(4) Hillary Clinton: hemos creado Al-Qaeda, https://www.youtube.com/watch?v=Dqn0bm4E9yw

(5) Él discurso de Colin Powell, https://www.youtube.com/watch?v=J4_AS-rPRq4

(6) Las bombas de Sarkozy sobre la moneda africana, http://www.nigrizia.it/notizia/le-bombe-di-sarkozy-sulla-moneta-africana

(7) Foro de Cooperación de América del Sur – África, https://es.wikipedia.org/wiki/ASA


Traducido del italiano por Michelle Oviedo