La isla caribeña de Barbuda pone en marcha un proyecto que busca el traspaso de la energía de combustibles fósiles a una combinación de tecnologías renovables, como solar y eólica primaria, apoyada en un moderno sistema de almacenamiento de baterías.

El Fondo de Desarrollo de la Caricom acordó donar un millón de dólares para este proyecto y ya cuenta con la firma del Primer Ministro de Antigua y Barbuda.

La construcción de la central eléctrica cuenta también con el financiamiento de los Emiratos Árabes Unidos y de Nueva Zelanda, comentó el primer ministro Gaston Browne, “aunque EAU financia dos terceras partes del mismo”.

La aspiración gubernamental es que la isla llegue a ser totalmente verde en términos energéticos, aunque por el momento la inversión es para producir 600 kilovatios de energía renovable. Browne aseguró que esto hará bajar, además, el costo de la electricidad.

Caricom brinda asistencia técnica y financiera a sus estados miembros para que puedan tener beneficios de su participación en el Mercado Único y la Economía del organismo. Su financiamiento ha sido integralmente para la instalación de la planta de energía solar continua.

El primer ministro anticipó que las obras en Barbuda son el primer paso y que en breve se comenzará a trazar el plan para que Antigua también cuente con energía verde.

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