Se movilizaron y festejaron el momento del cambio de año, con sus chaquetas amarillas y continuando las protestas en Champs Elisées, acompañados de globos y alegría, además de las consignas que piden la renuncia del presidente Macron.

Es que el movimiento de protestas sociales francés, que comenzó en noviembre, se ha convertido en la expresión del hartazgo generalizado con el sistema galo.

Anoche los ‘chalecos amarillos’ celebraron la llegada del Año Nuevo dando continuidad a sus manifestaciones, sólo que agregando un tono más bien festivo.

En el momento en que el movimiento intentó sumarse a las celebraciones que tenían lugar en los Campos Elíseos de París, la policía irrumpió para impedirles el acceso. Fue entonces cuando cambiaron de estrategia y ondearon sus globos amarillos, mientras coreaban pidiendo que se vaya Macron y sin generar ningún altercado.

Mientras, en Burdeos,  los chalecos amarillos se apostaron en el puente de Aquitania sobre el río Garona. Según señalan distintas fuentes, en Antibes ubicada al sureste del país, un chaleco amarillo de 24 años que estaba en uno de los puntos de protesta del movimiento junto a una autopista, fue atropellado por un vehículo y llevado por sus compañeros a un hospital en estado grave. El automovilista se dio a la fuga.