La Mesa de la Izquierda Independentista de Cataluña de la CUP presentó un decálogo que pretende ser «un plan de lucha feminista contra la pobreza y la violencia machista» bajo el titulo «Feminismo para cambiarlo todo».

En una rueda de prensa celebrada frente al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), las organizaciones convocantes leyeron este lunes (19.11.2018) un manifiesto que denuncia que «la violencia es la herramienta que tiene el sistema patriarcal y capitalista para someter a las mujeres y a las clases populares», coincidiendo con que el 25 de este mes se celebra el día contra la violencia de género.

La violencia se expresa de distintas formas, afirma el texto leído por Adriana Roca, Laia Casas y la diputada de la CUP Natàlia Sánchez, pero ante todo en una «violencia estructural» que «afecta a las condiciones materiales y afectivas de las mujeres y que es ejercida por el mismo sistema».

El manifiesto también pone de relieve la «feminización de la pobreza», evidenciada por la brecha salarial, las jornadas reducidas o el hecho de que las mujeres sean estadísticamente más pobres que los hombres.

Ante esta situación, la Mesa de la Izquierda Independentista propone diez puntos de actuación, que considera que son «indispensables para poder vivir una vida digna» y «un proyecto de sociedad libre en el que todos puedan vivir en dignidad y las mujeres no sean el verdugo de la acumulación de la riqueza».

Estos son: que los salarios y pensiones alcancen los 1.200 euros y se recuperen de forma «inmediata» los artículos de la Ley de Igualdad aprobados por el Parlament y suspendidos por el Tribunal Constitucional; expropiar las viviendas vacías y una sanidad y educación 100 % «públicas, laicas y con perspectiva feminista».

Además, considera necesario eliminar la Ley de Extranjería y salir de la Unión Europea y la OTAN; que el aborto sea libre y gratuito y se prohíban los vientres de alquiler; la eliminación de las violencias machistas; un plan de prevención contra dichas violencias; la incorporación de una perspectiva LGTBI en la educación y la exigencia del «derecho a la autodeterminación para la soberanía de las mujeres».

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