La compañía de teatro Sarruga llegó con su familia de gorilas Beringei a Lo Hermida, en Santiago de Chile.

Es viernes por la tarde y los niños de la población repletan la populosa calle Caracas en el corazón de Peñalolén. Es verano y acaba de oscurecer, las luces que iluminan las marionetas se encienden y los chiquillos corren tras los gorilas, que rugen como si estuvieran en un bosque del África. Quizás las futuras generaciones sólo los puedan ver convertidos en marionetas, ya que los gigantes gorilas Beringei están en grave peligro de extinción.

El texto y el foto-reportaje es de Dalia Chiu: