¿Qué le sugieren las siguientes evidencias?

Estados Unidos, al igual que Rusia, tiene armas nucleares suficientes para destruir toda la vida en la tierra muchas veces.

Los funcionarios del Pentágono dicen que la guerra fría con Rusia es para el lucro y la burocracia.

Cuando hubo peligro de que la paz estallara en Siria, el ejército estadounidense intervino para impedirlo, aparentemente en contra de la voluntad del presidente Obama.

Estados Unidos facilitó un golpe en Ucrania, el cual se caracterizó por un voto de secesión en Crimea como una invasión e incautación forzosa, la cual se realizó en base a afirmaciones sin sustento sobre el derribo de un avión, por la apertura de un base de misiles en Rumania, por el inicio de la construcción de una base de misiles en Polonia, el mayor desplazamiento de tropas y equipo hacia Europa del Este desde la segunda Guerra Mundial, desestimó toda insinuación de que el enemigo que estaba provocando todo esto era Irán, y difundió repetidas veces el mensaje de que Rusia era una amenaza para Europa (incluso si Rusia, a pesar de sus verdaderos crímenes y ofensas como bombardear Siria, no era una amenaza para Europa).

La supuestamente llamada inteligencia de los Estados Unidos difundió el mensaje de que Rusia había pirateado la red eléctrica de Vermont, lo que resultó ser una historia inventada.

Podrían haber sido las mismas personas que dijeron que Trump tenía un servidor informático vinculado con el Banco de Rusia, pero no hay evidencia de ello.

Los medios empezaron a publicar varias historias de que el canal C-Span y otros canales habían sido hackeados por Rusia. De ello no hay evidencias. C-Span dijo que Rusia no lo hizo. Alguien que no fue Rusia había hecho que se transmitiera el contenido de la televisión rusa en C-Span.

El Washington Post, cuyo dueño más parece de la CIA que del Washington Post, publicó un artículo que presentaba una ridícula lista de fuentes de información, muchas de las cuales están entre las mejores que existen, como propaganda rusa.

El supuestamente llamado “servicio de inteligencia” presentó una serie de reportes carentes de pruebas e historias que convencieron a muchos estadounidenses de que Vladimir Putin había irrumpido en el sistema de voto electrónico de Estados Unidos. Los reportes intentaron implicar, sin tener la mencionada evidencia, de que Rusia hackeó los correos electrónicos de los Demócratas y los dio a WikiLeaks. Los intentos de presentar pruebas durante la primera mitad se quedaron cortos, y ni hablar de los de la segunda mitad.

Cosas que podían ser revisadas independientemente en esos reportes, fueron desmoronándose. Los proveedores de servicio de Internet que se identificaron como rusos no eran rusos. Cuando los informes aumentaron en número gracias a información pública disponible sobre la red televisiva de Rusia, muchos detalles fueron desestimados ya que evidenció una seria falta de preocupación por la exactitud de la información.

Cuando Donald Trump dijo que se necesita más pruebas antes de creer en la CIA, fue porque salió a la luz una historia no verificada sobre un escándalo de sexo y corrupción acerca de Trump.

En mi opinión, todas estas evidencias mencionadas sugieren un deseo de muerte, una inclinación hacia el fin de la especie. No debería ser presentado simplemente como intentos de oposición a Donald Trump. Creo que la predisposición de los medios a otorgar a Trump tanto tiempo al aire equivalente a miles de millones de dólares, y por consiguiente la Casa Blanca, así como el posible apoyo del director del FBI, provienen de una inclinación similar.

Pero el ‘Estado profundo’ atacaría a su propia madre si ella se opusiera a la selección del enemigo, y con ello a la venta de armas y a la dominación del mundo.

Háganlo bajo su propio riesgo. No lo hagan poniendo en riesgo nuestro futuro.

Traducido del inglés por Andrea Lissette Armijos Ango

El artículo original se puede leer aquí