Entrevistada en ocasión del programa En la Oreja de Pichincha Universal, Pía Figueroa, codirectora de la Agencia Internacional de Noticias Pressenza, conversó sobre el Congreso por la Paz que se realizó en Berlín, las expectativas de los activistas, el contexto en el que se da el encuentro, el estreno de la película «Más allá de la venganza» y una mirada sobre la situación que está viviendo el pueblo europeo.

¿Cuál  es el contexto del encuentro en Berlín, cuáles son los temas y cuáles son los eventos más importantes del IPB WORLD CONGRESS, en tu opinión?

En contexto, cabe explicar la situación que se vive en Europa y la situación mundial respecto a las armas nucleares. A diferencia de Sudamérica, todo el territorio europeo está plagado de cabezas nucleares y se ha generado una tensión política creciente muy similar al momento de la Guerra Fría hace pocas semanas.

En una reunión de medios apareció Putin pidiéndole a la prensa internacional que hiciera saber que se le está acorralando, con gran presión a usar las bombas nucleares, presión cada vez más fuerte por parte de Estados Unidos, por parte de los países de la North Atlantic Treaty Organization (NATO).

Hay un clima de tensión tal, que si se pone un reloj, desde el primer minuto hasta las 12 como hora de detonación de una bomba o arma nuclear, si lo pudiéramos graficar de ese modo, entonces estaríamos tres minutos antes de una detonación.

Por eso en Berlín se inauguró este congreso por el desarme y por un clima de paz a tres minutos antes del mediodía como símbolo de cuán cerca estamos de una probable detonación, fruto de las tensiones internacionales que se viven en Siria, en Ucrania y en todos los países del Este europeo, que se han venido armando con fuerzas de la OTAN, presentes no solamente en las calles, sino incluso en las escuelas primarias.

Ese es el clima en el que se está dando este enorme congreso, que ha podido organizarse en Berlín y que está convocado por parte de International Peace Bureau (IPB) a todos los activistas anti nucleares y a todas las organizaciones por el desarme nuclear que se han congregado acá.

Recibimos noticias de que en la ONU van a debatir una resolución para negociar el Tratado de Paz de Prohibición de armas nucleares, ¿se está hablando de este tema en el foro?

Sí, claro que se está hablando de esto, y estamos muy contentos de las resoluciones de Austria que ha conseguido plegar a muchísimas naciones detrás de esta propuesta. Sin embargo, también hay que tener un cierto realismo, la elección presidencial de Estados Unidos en noviembre, podrían significar que las negociaciones que se hagan en oOctubre y en la primera semana de noviembre no necesariamente lleguen a puerto, porque estaría en manos de un gobierno saliente por parte de Estados Unidos.

No obstante, hay mucho apoyo creciente por el tipo de gente que estamos aquí en Berlín, como activistas del desarme nuclear, con un apoyo muy creciente al Gobierno austriaco.

Revisando el programa, además de talleres y conversatorios, está el estreno de la película “Más allá de la venganza”, conocemos que has tenido la oportunidad de conversar con el director de la película. Cuéntanos sobre este filme.

Luz Jahnen, el productor se encuentra aquí, por supuesto, participando en primera persona en este congreso, así como Álvaro Orus que es el cineasta que ha dirigido la película. Ellos dos han sido muy entrevistados porque la propuesta es que no hay posibilidad para la paz sin reconciliación.

El tema de la reconciliación supera a la forma normal de buscar solución a los conflictos a través de la venganza y de una justicia entre comillas, que no es más que un disfraz respecto de ese sentimiento de venganza, de revancha, que no solamente anida en los pueblos sino también en las personas a nivel de individuos.

Esta película se estrenará por primera vez en Berlín, y de lo que hemos podido ver del tráiler no solamente se está recogiendo experiencias personales de una profunda reconciliación, que supera esa necesidad de justicia o de venganza, sino además de colectividades y de pueblos que buscan formas nuevas de construir la paz.

En ese escenario y no necesariamente vinculado a la película misma, acá en el congreso se está comenzando a tomar la experiencia de Colombia y su plebiscito como una forma en que un pueblo puede poner fin pacíficamente a la guerra, a través de conversaciones.

Esta película, sin embargo, ha desatado diálogos muy interesantes porque como bien decían en su introducción, el filme lleva a reflexionar a un nivel muy profundo, incluso a hacerse cargo en la propia vida de esa formas tan sutiles que toma a veces la venganza para solucionar un conflicto, y como lograr una reconciliación que supere lo que llamamos habitualmente perdón, en el ámbito de los derechos humanos, entendiendo como más allá del perdón y la justicia estaría la reconciliación, a eso apunta esta tan interesantísima película.

Hemos participado en conferencias de paz y nunca se ha vista el tema de la reconciliación  puesto en primer plano

De hecho, la noche del 1 de octubre se va a formar con todos los participantes de este congreso, en la plaza que enfrenta a la Universidad Técnica de Berlín, un símbolo humano construido con las manos, un símbolo de la paz que se transforma dinámicamente en el símbolo de la No Violencia, celebrando e iluminando con los celulares la oscuridad de este momento, que con una pequeña luz refleje nuestras aspiraciones más profundas.

Sabemos que hay mucha gente en el mundo que no aprueba la violencia y que quiere el desarme, entonces se va a formar el símbolo de la paz para terminar en la no violencia como algo que va más allá de un simple acuerdo de paz o construcción de una paz, porque la no violencia activa parece ser la forma que va con la reconciliación. El símbolo se va a llamar: “más allá de la paz, la reconciliación”.

Finalmente, sabemos que has visitado Europa, ¿cómo se ves su situación psicosocial, existen algunas diferencias con tus viajes anteriores?

Estuve hace dos meses en Europa y el cambio es sustancial, sobre todo en Inglaterra. En Londres es tremendo el clima psicosocial que se vive después del Brexit, el resto de Europa está en un momento de muchos temores: temor al terrorismo, temor a la discriminación, temor a la policía y al control; pero en Gran Bretaña es realmente muy impactante.

Estuve una semana en Londres y no solamente me encontré con gente desesperada que vive una crisis fuerte, sino también la incertidumbre de un país entero que no sabe cómo salir del brete en que quedó metido con esta elección tan apresurada, que llevó a la derecha a optar por una salida de la Unión Europea.

Se han consolidado las fuerzas antihumanistas en estos países y eso es muy desmotivador, es más, me tocó conocer personas que en su propia familia han educado a sus hijos de forma progresista para que superaran la discriminación y sin embargo, hoy se encuentran con que sus hijos pertenecen al ISIS, pertenecen al terrorismo y que están dispuestos a hacer cualquier cosa con tal de marcar la diferencia. Es un momento totalmente opresivo y discriminador, la violencia la vives en cada esquina, todos los días.

Es muy fuerte lo que está pasando, de todo lo que he visto en Europa, lo peor lo sentí en Inglaterra, sinceramente.

En Berlín, en cambio, ¿hay una sensación de esperanza?

Si, Berlín es una ciudad muy joven, tal vez el 80 % de la gente tiene menos de 30 años, hay una gran esperanza en ello, pero al mismo tiempo te dicen cuando empiezas a charlar que no se sabe a qué futuro vamos, o cómo es, por ello es urgentemente necesario delinear imágenes movilizadoras para aquel futuro.