Paz en el corazón, Luz en el entendimiento

«Prepárate a entrar en la más hermosa Ciudad de la luz,
en esta ciudad jamás percibida por el ojo,
nunca escuchada en su canto por el oído humano…
Ven, prepárate e entrar en la más hermosa Luz…»
(de la ceremonia de Asistencia, libro El Mensaje de Silo)

Con pesar recibimos la noticia de la partida de nuestro joven amigo Sebastián Grosso «Cabeza».

Un gran humanista, un gran mensajero y un ferviente portador de las enseñanzas de Silo que inspiró a muchas personas de muchos lugares.

Nació el 13 de junio de 1977. Partió de este tiempo y espacio el Domingo 16 de Octubre 2016, al anochecer, con apenas 39 años.

Había formado una familia con Estefania Vignola y trajeron al mundo a Emilia y Alejandro.

Hace tiempo luchaba con una grave afección y gracias a su propia disposición, al afecto y las oleadas de bienestar de los amigos, sumado al tratamiento médico, contra todos los pronósticos logró estirar la batalla suficiente tiempo para (como él mismo comentó) profundizar las experiencias y transformar su propia vida. «Soy otra persona» me comentó al referirse a lo mucho que avanzó su Paz y sus comprensiones ante la situación de confrontación con la finitud de la vida.

Sebastián estaba escribiendo porque quería dar testimonio de sus experiencias y seguir inspirando a otros. Ya leeremos esos escritos. Por ahora nos deja su ejemplo de lucha, de afecto y de compromiso.

Sebastián con su hija Emilia, disfruntando una tarde en Parque Carcarañá (Argentina). Foto Paula Aiello

Sebastián con su hija Emilia, disfruntando una tarde en Parque Carcarañá (Argentina). Foto Paula Aiello

Mi agradecimiento, con cariño, y el deseo de que su espíritu siga desarrollándose en otros planos.

Mi acompañamiento y abrazo fraterno con Estefi, su familia, y con tantos amigos que tanto lo vamos a extrañar.

Gabriel Gómez Fiori

PD: Estas palabras no son sólo mías, sino de muchos amigos que me expresaron el mismo sentir al leer esta nota en el original en nuevaregion.com

VIDEO: de cuando nuestro amigo participó en la expansión de El Mensaje de Silo en Guatemala

Al centro, nuestro amigo compartiendo un Oficio en la Sala del Parque de Estudio y Reflexión Carcarañá (Argentina)

Al centro, nuestro amigo compartiendo un Oficio en la Sala del Parque de Estudio y Reflexión Carcarañá (Argentina)

«…//… las acciones realizadas siguen actuando y su influencia no se detendrá jamás. Esta cadena de acciones desatadas en vida no puede ser detenida por la muerte. ¡Qué profunda es la meditación en torno a esta verdad, aunque no se comprenda totalmente la transformación de una acción en otra!…»
(de la ceremonia de Muerte, libro El Mensaje de Silo)