• La enmienda transaccional aprobada en el pleno municipal de hoy respalda los planes del gobierno municipal para bajar un 7% el recibo de Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a la gran mayoría.
  • Ahora Madrid no respalda la propuesta de reducir un 2% el IBI a los grandes inmuebles de muy alto valor catastral. Es necesario plantear una subida para garantizar la redistribución y el gasto social.
Ahora Madrid apuesta por una política fiscal que beneficia a la inmensa mayoría, por garantizar el gasto social y por realizar las inversiones en equipamiento que reclaman los distritos de la ciudad. Para ello es fundamental aprobar unos presupuestos en los que se apueste por la redistribución al tiempo que se asegura la recaudación necesaria para afrontar todas esas partidas.
Celebra, por tanto, que los demás grupos políticos en el Ayuntamiento hayan aprobado en el Pleno de hoy, miércoles, una bajada del 7%  del IBI para todos los inmuebles de uso residencial y para la gran mayoría de los inmuebles de usos no residenciales. Eso es exactamente lo que se proponía desde principios de septiembre desde el Área de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Madrid.
No puede en cambio apoyar otra de las propuestas incluidas en una enmienda transaccional presentada por el grupo socialista que consiste en la bajada del 2% en el recibo del IBI para los tipos diferenciados de los inmuebles urbanos de uso no residencial. Esto mina la voluntad redistributiva de Ahora Madrid. Desde el gobierno municipal se había propuesto que este pequeño porcentaje de grandes inmuebles de altísimo valor catastral asumieran una subida del 10% del recibo del IBI. Un aumento perfectamente aceptable para grandes propietarios.
Para poder entender el pequeño porcentaje en discusión, conviene subrayar que afectaría únicamente a 870 almacenes de los más de 51.000 que existen en Madrid y que se encuentran en ese tipo diferenciado; solo a unos 2.600 comercios de los más de 97.000, o a menos de 1.000 edificios industriales de los 12.000 existentes en la ciudad. Lo valores catastrales de estos inmuebles (que aparecen en la tabla adjunta) permiten entender que la subida del IBI es asumible para sus dueños al tiempo que compensa la bajada en la recaudación municipal.
Ahora Madrid espera que en las próximas semanas, cruciales para la negociación de los Presupuestos de 2016, la voluntad política y la responsabilidad que reclama la ciudadanía permita llegar a un acuerdo equilibrado entre la recaudación y el imprescindible gasto social que beneficiará a la gran mayoría