La Red de Renta Básica ha celebrado en Fuenlabrada (Madrid) su XIV Simposio estatal con el lema ‘La Renta Básica como respuesta a la crisis’. Se ha desarrollado durante todo este sábado 29 de noviembre.

Ha sido organizada desde la Concejalía de Juventud e Infancia de Fuenlabrada, cuyo concejal, Paco Paloma, ha invitado a mantener una ‘reflexión abierta que lleve a la acción’.

Ha abierto la jornada el Presidente de dicha Red, el economista y profesor de universidad Daniel Raventós, quien ha reconocido que es un tema sobre el que se habla continuamente en este momento y ha vuelto una vez más sobre los puntos más polémicos del debate respecto a esta propuesta económica, que pasa por una decisión política de quienes gobiernan. Sobre estos argumentos en contra y los argumentos a favor, será el mismo Raventós quien escriba en los próximos días, haciéndonos eco de ello en Pressenza.

Pero queremos rescatar algunos de los que ha expuesto. Por ejemplo, ese mito de que el trabajo dignifica, cuando un porcentaje alto de la población no tiene acceso al mismo (España lleva 23 años con más del 15% de paro), el profesor barcelonés afirmaba “lo que da la dignidad es la existencia material cubierta”; además de dar mayor libertad y eliminar daños sociales como la sensación de fracaso que viven quienes reciben subsidios sociales.

Y sobre la financiación, que siempre se pone en tela de juicio, ha anunciado que está por salir un nuevo estudio hecho por Lluís Torrens, presente también en esta jornada, Jordi Arcarons y él mismo, esta vez sobre todo el estado español (con la excepción de Navarra y País Vasco que tienen su propio sistema de recaudación, gestión e inspección del IRPF) con resultados positivos sobre la viabilidad de la RB, en el que queda claro cómo es posible tal financiación con una reforma fiscal, que suponga la redistribución de la renta del sector más rico de la población al resto. En este sentido Daniel Raventós ha reconocido que la RB es una elección que no gustará a todos porque no favorecerá a todos.

Más tarde en distintas mesas se ha hablado sobre la RB y la pobreza infantil, de cómo pasar de las Rentas Mínimas de Inserción –subsidios para pobres con cada vez menos financiación, lo que está provocando un desastre en miles de familias- a la Renta Básica Universal que garantizaría un mínimo de condiciones materiales dignas para toda la población, sin hacer sentirse estigmatizado a quienes reciben aquellas ayudas y como podría ser una buena respuesta ante el desmantelamiento del estado de bienestar provocado por la crisis.


La pobreza infantil es fundamental visibilizarla

Acerca de la pobreza infantil, los datos conocidos y hechos públicos por organizaciones como UNICEF, Caritas, etc. pero poco publicitados en los grandes medios de comunicación son alarmantes. España es el segundo país, después de Rumanía, en Europa con mayor pobreza infantil.

Claramente la pobreza infantil está asociada en general al paro, a la falta de medios económicos de los progenitores. Y si la pobreza que va creciendo en el estado español exponencialmente, afecta en un porcentaje mucho mayor a los niños. Son los grandes perjudicados y esta situación permanece invisibilizada.

Ignacio Campoy, profesor en la Universidad Carlos III de Madrid ha concretado datos: el 30% de la población menor de 16 años vive en hogares pobres. Porcentaje que aumenta hasta el 46% cuando se trata de familias monoparentales, hasta el 49% cuando uno de los progenitores no es español y hasta el 57% cuando los padres no han superado la educación secundaria.

José Fernández Albertos, politólogo y científico del CSIC, ha llamado la atención sobre la falta de conciencia en nuestro país en lo que respecta a la pobreza infantil y la falta de voluntad política de afrontar este tema.

Fernández ha ido desgranando las ventajas que podría tener una RB respecto a los actuales subsidios, tanto en el campo material como sicológico del individuo y ha manifestado la viabilidad de dicha medida si se aplicara únicamente a la infancia.

Campoy alertaba sobre el modelo de sociedad neoliberal que hemos construido y en el que se defiende, por ejemplo como objetivo de la educación la competitividad, olvidándonos de los derechos de los niños, cuya Convención España firmó en su momento. El mito que dice ‘es natural que el hombre actúe para beneficio económico personal’ y que justifica lo que se está haciendo, es perjudicial para los derechos de los niños y es necesario desmontarlo, es fundamental desmontarlo y ello se logra con ‘educación inclusiva’.

Y nuevamente ha presentado datos significativos: el gobierno español destinó en el 2013 al fondo extraordinario para la infancia 7,4 millones de euros al tiempo que destinaba 914 millones a Defensa.

Desde distintos ángulos, se ha ido viendo a lo largo del día como la Renta Básica Universal ayudaría a dar una respuesta a la situación que ha generado la crisis y que sufre un porcentaje alto de la población en distintos aspectos de su vida.

El Simposio ha finalizado con una asamblea general de la Red de Renta Básica.