La Secretaría General de la Gobernación bonaerense y la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) trabajan en conjunto en la quinta campaña de recolección de equipamiento informático en desuso, que se extenderá hasta el 28 de noviembre y que tiene como objetivo generar conciencia y evitar que los desechos electrónicos dañen al medio ambiente.

“La articulación con la UNLP y con organismos provinciales es fundamental para fomentar la donación y el reciclado de equipos: esto no sólo evita la contaminación sino que sirve como práctica para los alumnos y ayuda a achicar la brecha tecnológica ya que una vez puestos en condiciones son donados a organizaciones, instituciones y escuelas”, subrayó el secretario general, Martín Ferré, en un comunicado de pensa enviado a PuntoGov.

A través de la Subsecretaría General y la de Modernización del Estado, la provincia cedió un espacio físico para la campaña de la UNLP y dispuso móviles oficiales para colaborar con el traslado del equipamiento donado.

“El desarrollo de nuevas tecnologías provoca el recambio constante de artefactos y, con ello, un incremento de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE), por lo que es trascendental un trabajo conjunto para generar conciencia y lograr la disposición segura de elementos o favorecer la reutilización tecnológica”, explicó el subsecretario general, Pablo Pernicone, a cargo de las áreas de informática y de telecomunicaciones de la provincia.

El subsecretario para la Modernización del Estado, Santiago Cafiero, sostuvo que “la iniciativa resulta vital en lo que refiere a la modernización de las prácticas ciudadanas que se basan en un pilar fundamental como es el cuidado del medio ambiente” y aseguró que “este trabajo produce un impacto claro en materia ambiental, cultural, social y económica”.

La campaña se realiza en el marco del Programa E-Basura de la Facultad de Informática de la Universidad Nacional de La Plata.

A partir de esta iniciativa se reciben donaciones de equipamiento en desuso que, una vez reciclados, son enviados a establecimientos educativos y otras organizaciones.

Desde su puesta en marcha, en 2009, fueron beneficiadas 164 instituciones, lo que involucra a más de 34 mil personas con posibilidades de alfabetización digital.

Según precisaron los especialistas de la dirección provincial de Sistemas de Información y Tecnologías (DPSIT), en promedio, los equipos informáticos tienen un 3 por ciento de elementos potencialmente tóxicos, como plomo, mercurio, berilio, selenio, cadmio, cromo; sustancias halogenadas y otras ignífugas como el arsénico y el amianto que pueden generar daños ambientales o a la salud de las personas.

No obstante, los técnicos aclararon que los componentes informáticos no contaminan mientras estén en funcionamiento o almacenados correctamente, a la vez que detallaron que se puede recuperar y reciclar entre un 90 y un 95 por ciento de cada equipo.

Por esta razón, la DPSIT recomendó no sacar a la calle ni arrojar a la basura monitores, computadoras o impresoras en desuso y, por el contrario, exhortó a los usuarios a llevarlos a centros de reciclado para que estos dispositivos o algunas de sus partes puedan ser reutilizados y donados a instituciones sin fines de lucro o escuelas.

Por D C

Fuente: Puntogov

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