Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) manifestaron el miércoles su esperanza de alcanzar un acuerdo de paz con el Gobierno de Bogotá, en el aniversario de la muerte de su fundador, Manuel Marulanda Vélez.
«Ahora nos encontramos en La Habana (capital de Cuba), buscando la paz. Somos optimistas, sin lugar a dudas hemos avanzado en la construcción de acuerdos parciales con la contraparte, el Estado», destacó Pablo Catatumbo, uno de los negociadores de la guerrilla.

«Las grandes mayorías colombianas anhelan la terminación del más largo y doloroso conflicto interno escenificado en el continente», añadió Catatumbo.

Tras varias rondas de diálogos, comenzadas en noviembre de 2012, las delegaciones del Gobierno del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y las FARC han llegado a consensos sobre dos puntos de su agenda, la reforma rural integral y la participación política.

Actualmente, ambas partes abordan el tema de las drogas ilícitas, para luego llegar a un acuerdo que ponga fin a un conflicto que dura ya casi más de medio siglo.

Pero también existen otros asuntos que se deben discutir: el abandono de las armas, la reparación a las víctimas y el mecanismo de refrendación de un eventual acuerdo de paz.