El nuevo presidente de China, Xi Jinping, ha llegado este viernes a Moscú, capital rusa, para abordar con las autoridades de este país el desarrollo de las relaciones bilaterales.

En su primer viaje al extranjero desde su investidura la semana pasada, Xi Jinping tiene previsto reunirse en Moscú con el presidente Vladimir Putin y el primer ministro Dimitri Mdvédev a fin de tratar distintos asuntos de la actualidad mundial.

“El hecho de que Rusia, país amigo, haya sido elegida como primer destino de mi visita de Estado demuestra el carácter particular de nuestras relaciones estratégicas”, afirmó Xi a la prensa oficial rusa.

Este viaje del mandatario chino se realiza en respuesta a la invitación de su homólogo Putin, quien viajó al país asiático en junio de 2012, menos de un mes después de asumir el poder.

Durante esta visita, se firmará un acuerdo que permite a Moscú vender a Pekín cerca de 70 mil millones de metros cúbicos de gas en los 30 próximos años.

Rusia y China rubricarán también un acuerdo preliminar por el cual grupos chinos participarán en el desarrollo del extremo oriente ruso e invertirán en la construcción de carreteras y en proyectos de telecomunicaciones, según Serguei Sanakoiev, secretario de la cámara chino-rusa para la promoción del comercio de productos industriales de innovación.

Moscú y Pekín gozan de buenas relaciones bilaterales, políticas y comerciales. En los últimos veinte años, los intercambios comerciales bilaterales se multiplicaron por 14 y alcanzaron el año pasado la suma récord de 88.200 millones de dólares, de acuerdo con el jefe de Estado chino.

Cabe mencionar que Xi dejará Moscú el próximo domingo para viajar al continente africano, donde tras visitar Tanzania (días 24 y 25) y Sudáfrica (25-26), se dirigirá a la República Democrática del Congo (RDC) (29-30).