En el homenaje a Danielle Mitterrand en el primer aniversario de su partida, realizado el viernes 23 de noviembre en el salón Víctor Hugo de la Asamblea Nacional de París, pudimos comprobar la dimensión mayor de esta resistente eterna.

Las valoraciones, las anécdotas, los aprendizajes a su lado y el ejemplo que ha sido para tantas generaciones de franceses y extranjeros, se vieron plasmados a lo largo de los testimonios y en las tablas redondas de las que participaron muchos activistas, todos cercanos a Frances Libertés – Fundación Danielle Mitterrand.

Gilbert Mitterrand, actual presidente de la Fundación e hijo de François Mitterrand y Danielle Douze (nombre de soltera), la describió emocionado como “una mujer de una lucidez inexorable, paciente, irónica, iluminada y expeditiva” y “con la capacidad de apuntar su acción siempre hacia los valores profundos”.

Para también valorar que las acciones que ella realizaba iban “contra las causas del sufrimiento y no solamente para paliarlo” y “que la fuerza de su realismo e idealismo unidos apuntaban a crear un mundo más igualitario, más humanista, más sustentable y más justo”.

Otros testimonios

El presidente de honor de Frances Libertés y ex director general de la UNESCO, Federico Mayor Zaragoza también tuvo palabras de reconocimiento hacia la homenajeada: “Danielle Mitterrand era una guía, un punto de referencia para todos nosotros. […] Ella quería devolver a los Derechos Humanos su dimensión liberadora, que liberaran al ser humano del miedo. […] Danielle será por siempre un símbolo de la rebelión por su espíritu de resistencia permanente, siempre de actualidad por su insumisión a los especuladores”.

Yamina Benguigui, directora y productora de cine llamó a Danielle “madre elegida” y narró con lágrimas en los ojos algunas de las vivencias en común. La definió de este modo: “Danielle era única, para ella todo era posible, atacaba montañas y nos miraba a los ojos y nos decía: “podemos hacerlo”.

Y para explicar lo contagioso de su entusiasmo agregó lo siguiente: “Nos ha metido a todos los que hemos trabajado con ella un chip en la cabeza y cuando nos levantamos de la cama ya estamos en el modo: Danielle Mitterrand, eso se los confirmo”.

“Más allá de todo lo que ella hizo, en esta fundación se formó ha mucha gente, como a mí misma, ella me enseñó el compromiso, ella me enseñó a dejar la bronca de lado para poder avanzar. Desde hace veinte años yo hago películas sin bronca, sin resentimiento, porque avanzo mirando al otro e integrándolo en mi espacio y eso fue Danielle que me lo enseñó” concluyó.

Kendal Nezan, presidente de la Fundación Instituto Kurdo de París relató las vivencias a la par de Danielle, tanto en los campos de refugiados en Irak y Turquía como las luchas en el territorio francés para dar visibilidad a la tragedia kurda y a las injusticias sufridas por este pueblo. “Llegó a amenazar al presidente Mitterrand que si no tomaba cartas en el asunto para disolver el lobby proSaddam que imperaba en el hexágono ella se inmolaría junto a dos resistentes kurdos que planeaban hacerlo en la Plaza de la Concorde”.

Danielle Mitterrand es considerada por los kurdos como una madre, definida por su trabajo como “una montaña que protege al pueblo kurdo”.

Su compromiso con los derechos de los pueblos fue desarrollado en el coloquio a través de una mesa redonda de la que participaron Carmen Castillo y representantes de Massoud Barzani, el presidente de la Región Autónoma Kurda de Irak y del secretario general de la Francofonía, Abdou Diouf, con quien trabajaron codo a codo para resolver la salida de prisión de Nelson Mandela y el final del Apartheid sudafricano, del que Danielle Mitterrand tiene gran responsabilidad.

El resto de las mesas fueron sobre “La preservación y el reparto de los bienes comunes” con unos invitados de excepción como Susan George (fundadora de Attac) o la científica y activista india Vandana Shiva y otra sobre “El espíritu de resistencia y de indignación” donde se disertó ampliamente sobre la capacidad de oponerse a lo establecido y la capacidad de indignarse y no permanecer indiferente a lo que la pasa a los demás.

Para concluir

Las conclusiones de la jornada llegaron de la mano de los jóvenes Bakary Sakho, miembro fundador de la asociación Braves garçons d’Afrique (Bravos jóvenes de África), Thierry Marchal-Beck, presidente del Movimiento de Jóvenes Socialistas (MJS) y Sophie Bordères, coordinadora de campañas de Agir pour l’environnement (Actuar por el medio ambiente). En un tono alto y de fuerte compromiso, mostraron el ineludible interés de mantener izadas las banderas por las que siempre batalló Danielle Mitterrand. Los verbos que acompañan este compromiso, según Sophie B. son: denunciar, apropiarse de las luchas legítimas y hacerlas propias y unirse para que todas las acciones converjan en un resultado que beneficie a todos, que tenga en cuenta el bien común.

Como dijera Gilbert M. “este no es un coloquio para repasar el pasado, si no para lanzar el futuro. Y toda esta emoción, este enorme reconocimiento hacia la figura de Danielle y tanto agradecimiento, la verdad que la mejor manera de expresarlo es continuar con la acción y el compromiso de las causas justas. Eso es lo que ella hubiera querido”.

Sergio Coronado, diputado de los franceses establecidos fuera de Francia y quien consiguiera la autorización de la Asamblea Nacional para realizar este evento lo dijo al inicio de la jornada: “Danielle Mitterrand, ¡presente!”.