Se abría el encuentro con estas palabras de Mabel Naya: “…Como todos ya sabéis, esta tarde queremos abrir un espacio a la inspiración como experiencia compartida con la participación de todos. Seguimos el viento suave que percibe el Ser en sus momentos sublimes, y que no es distinto al rumor de la divinidad, o lo que es lo mismo, lo Sagrado. Hay una manera de ver y oír la realidad desapercibida a veces, y es la de ver con los ojos del poeta que mas profundo nos habita. Así, cuando la experiencia inspirada nos descubre frente a frente al otro, al Ser ‘Nos sentimos nada porque estamos en presencia del todo’. Llegar a un estado emocionado no es tan difícil, elevar esto hasta la inspiración, es algo menos frecuente, pero muy posible si se crean espacios adecuados. Abrir esto en nosotros, elevarlo, y al contrario de lo que se suele hacer, darle vuelo hasta la mas alta inspiración… es una vía profunda de experimentación con lo Sagrado”.

Siguieron momentos lúdicos con juegos que invitaban a romper las barreras que imponen el desconocimiento del otro. El acercamiento llevó a hacer una quema de pedidospor dejar atrás aquello que cada cual quiere abandonar en su vida.

Y ya en el umbral, que separa “espacios mundanos de espacios sagrados”, comenzaron las palabras inspiradas que nacen de experimentar la realidad de otro modo, más allá de la grisura cotidiana, y de la búsqueda de desarrollo del Espíritu.

El video que sigue es un resumen de una tarde, que terminó en la sala de meditación con música y cuencos tibetanos.

Video de Juan Carlos Marín