Las comunidades Aymaras y los pobladores de las provincias también quechuas, defienden su modo de vida vinculado profundamente a la madre tierra, incluso los comerciantes que se mueven por todo el sur del Perú su fortaleza alimenticia está ligada a la agricultura tradicional, consumen y comercializan papas, ollucos, ocas, quinua cañihua, etc.

El rechazo a la explotación minera y concesiones petroleras, la defensa de la agricultura y las cuencas hídricas, fueron expresados en las siguientes demandas centrales:

1.- Retiro definitivo del Proyecto minero *“Santa Ana”*, con la derogatoria del Decreto supremo No 083-2007-EM.

2.-La intangibilidad del Cerro (ACU) Khapia, como reserva hídrica y agro ecológica, reserva paisajista y eco turística.

3.- Declarar a la región Puno Libre de concesiones mineras y petroleras, porque perjudican la agricultura, reserva paisajista y eco turismo.

Después de los 15 días de paralización el gobierno envió Una Comisión de Alto nivel para dialogar con sus dirigentes, encuentro que se realizó en la ciudad de Juliaca. Esta delegación solamente prometió la solución de las peticiones, por lo que fueron rechazados. Posteriormente en la Ciudad de Puno se realizaron manifestaciones que fueron empañadas por actos violentos, probablemente incitados por provocadores.

El viernes 27 viaja una delegación de autoridades puneñas a Lima para un siguiente intento de dialogo, sin la participación de los representantes del frente de Defensa y de los comuneros, que dio como resultado los siguientes acuerdos parciales:

-La intangibilidad del Cerro Khapia,

-La suspensión de las concesiones mineras en 4 provincias: Puno, El Collao, Chucuito-Juli y Yunguyo, por un periodo de 12 meses, oficializado con el Decreto Supremo No. 026-2011-EM.

-Suspensión por 12 meses el Estudio de Impacto Ambiental del Proyecto Minero Santa Ana, y llevar a cabo el proceso de consultas a las comunidades para la explotación de la Zona, aun sin Decreto Supremo.

La paralización se suspendió en vísperas de las elecciones presidenciales, anunciando que continuarían después de la misma. Efectivamente el 9 de Junio se reanudaron las paralizaciones, bloqueos y movilización hacia otras ciudades en particular hacia Puno Capital. En ésta segunda fase de la protesta aymara, no estuvieron todas las provincias como en Mayo, sin embargo la paralización fue contundente hasta llegar a estos recientes momentos. El Frente de Defensa de los Recursos Naturales aceptó el diálogo planteado por la Presidenta del Consejo de Ministros para lo cual nombraron 58 dirigentes para que se trasladen a Lima,

Precisamente mientras viajaban los dirigentes comuneros junto con Walter Aduviri se conoció de una citación judicial y una orden de detención preventiva, constituyéndose en una trampa, ya que fueron citados en Puno mientras viajaban a Lima. El dirigente Walter Aduviri fue invitado a Panamericana TV de Lima, ante el peligro y amenaza de ser detenido por la policía, se quedó en el mencionado canal, en los exteriores vigilaron algo más de 200 aymaras llegados de Puno y residentes en Lima, , desde el día miércoles 15, pasando la noche en la calle hasta el día jueves 16.

Finalmente el poder judicial, el juzgado respectivo revoco la controvertida disposición, cambiándola por una orden de comparecencia. En las siguientes horas se estaría formalizando el tercer diálogo de este conflicto social que cuestiona las explotaciones mineras, que no va por pedirles dinero, impuestos, regalías y óbolos, el planteo definitivo es no a las concesiones, que repercutirá en otros lugares y pueblos

En el Perú se realiza la feria más grande de concesiones mineras, petroleras y forestales, constituyéndose en *“el negocio del siglo”* como lo expresó el presidente García después de la firma del Proyecto minero *“Las Bambas”*, las consecuencias son dramáticas y destructivas para la vida, la agricultura y el medio ambiente. Los gobernantes de ayer y de hoy cuidan celosamente el llamado crecimiento económico del Perú sustentado en un modelo primario exportador, que pone por delante los negocios y el dinero que se concentra en muy pocos y sacrifican el presente y el futuro de los muchos, traicionando al ser humano y traicionando a la nación y a la patria en nombre de la cual actúan.