USA y la ONU denunciaron el recurso de la fuerza contra esas manifestaciones, convocadas por opositores frustrados por la falta de anuncios por parte del presidente Bashar Al Asad de una reforma democrática importante.
Alrededor de 200 personas se volvieron a manifestar el sábado ante el palacio de justicia de Deraa. *»La muerte antes que la humillación»*, *»Libertad, Libertad* gritaban cuando unas 40 personas fueron detenidas en Duma, a 15 km al norte de Damasco, en Homs (160 km al norte), y en Deraa (100 km al sur de la capital), epicentro de las revueltas.
Durante la madrugada fueron arrestados el arquitecto Jaled Al Hasan, el abogado Hasan Al Aswad y el profesor Isam Mahameed, según el observatorio sirio de derechos humanos (OSDH), basado en Londres.
Tambièn el viernes fue muerto un joven en Sanamein, otras 8 personas perecieron en Duma cuando al salir de una mezquita manifestantes lanzaron piedras a la policía, que respondiò disparando contra ellos, según dijo un testigo.
Sin embargo, la televisión oficial entrevistó a tres agentes de seguridad hospitalizados que afirmaron haber recibido *»durante la manifestación, disparos de parte de francotiradores emboscados en los techos y de motoristas encapuchados»*.
En la ciudad industrial de Homs también se produjeron manifestaciones y hubo 17 personas detenidas.
El OSDH exigió en un comunicado *»que sean liberados todos los prisioneros de opinión, que cesen las detenciones abusivas de opositores políticos y que se adopten medidas que permitan a los ciudadanos disfrutar de sus derechos legítimos, y de expresarse y manifestarse libremente»*.
USA resaltò *»la valentía y la dignidad»* de los manifestantes sirios, y condenò el *»uso de la violencia»* contra ellos.
Ban Ki-moon por otra parte, se declaró *»profundamente preocupado»* por la situación en Siria.
*»El secretario general está profundamente preocupado por la situación en Siria, donde se ha informado de la muerte de más civiles durante las últimas manifestaciones»* antigubernamentales, afirma el comunicado de su oficina.
Ban Ki-moon *»deplora el uso de la violencia contra manifestantes pacíficos y exhorta a que cese de forma inmediata»*, añade, y *»reitera su llamado al gobierno sirio a respetar sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos»*.
