Acaba de finalizar la votación mundial para la elección del Equipo de Coordinación Mundial de La Comunidad para el Desarrollo Humano, un organismo perteneciente al Humanismo Universalista, con más de 40 años de historia. La misma tuvo por objetivo conformar democrática y pluralmente el Equipo de Coordinación Mundial (ECM) por los próximos dos años.
Las elecciones estuvieron abiertas a todos los miembros plenos de dicho organismo, sin excepción, y el armado del Equipo se hizo priorizando la máxima diversidad geográfica y cultural posible. Los primeros 12 miembros elegidos provienen de cuatro continentes distintos: América, Europa, Asia y África. Asimismo, de la votación participaron en total 587 miembros de 23 países.
El Equipo queda compuesto por: Mohammad Nazrul Islam Jashim (Bangladesh), Luigi Ventriglia (Italia), Montserrat Curull (España), Glenda de la Fuente (Brasil), Yolanda Irisarri (España), Mónica Patricia Ormeño Oliva (Chile), Patricia Segovia (Argentina), Shaker Ahamed Biplob (Bangladesh), Michael Costa Almeida (Brasil), Mariano Quiroga (Francia), Jean Pierre Bado (Burkina Faso) y Tiziana Santineli (Italia).
Hasta la fecha, la Comunidad para el Desarrollo Humano cuenta con 1165 miembros plenos distribuidos en cuatro continentes. El movimiento humanista, al cual pertenece La Comunidad, surgió el 4 de mayo de 1969, con la célebre exposición pública de su fundador, Silo, conocida como “La Curación del Sufrimiento”, en un paraje de la Cordillera de los Andes llamado Punta de Vacas, cerca de la frontera entre Argentina y Chile. Los objetivos de La Comunidad son el estudio, el desarrollo, la difusión y la instalación de una nueva cultura basada en las ideas fundamentales del Humanismo Universalista. La Comunidad impulsa proyectos para la aplicación concreta de esta nueva cultura de la no-violencia en los diferentes ámbitos de la vida personal y social.
